Kuczynski se une a Fuerza Moderna en busca de un nuevo rumbo político en Perú

El escenario político peruano se ha vuelto a agitar con la reciente adhesión del expresidente Pedro Pablo Kuczynski a Fuerza Moderna, un partido político que ha sido fundado por la exministra de Desarrollo e Inclusión Social, Fiorella Molinelli. Este anuncio, realizado por Molinelli a través de sus redes sociales, marca un nuevo capítulo en la historia política del país, con miras a las elecciones generales de 2026. La exministra hizo hincapié en que su agrupación busca no solo recuperar, sino mejorar el plan de gobierno que Kuczynski presentó durante su mandato. Molinelli, en sus declaraciones, subrayó la importancia de reorientar el rumbo del Perú hacia el crecimiento, enfatizando la necesidad de una colaboración entre distintos sectores. La llegada de Kuczynski a Fuerza Moderna no solo aporta su experiencia, sino que también se vislumbra como un movimiento estratégico para revitalizar un proyecto político que, aunque se presentó en 2016, podría encontrar nuevas oportunidades en el contexto actual. "Agradecemos a PPK por confiar en nosotros", señaló Molinelli, resaltando la relevancia de su participación en este nuevo esfuerzo político. El contexto electoral en Perú para el año 2026 se presenta complejo y lleno de expectativas. Con cerca de 60 partidos políticos que podrían estar en condiciones de participar, la carrera para las elecciones se intensifica. Fuerza Moderna parece estar consolidándose como un contendiente serio, con la incorporación de figuras conocidas del entorno de Kuczynski, como los excongresistas Janet Sánchez y Gilbert Violeta. Este último, de hecho, ha asumido un papel activo en la Comisión Política del partido. Molinelli también ha revelado que ha estado recibiendo apoyo de otros actores políticos, entre ellos Raúl Diez Canseco Hartinger, un nombre que evoca una tradición de liderazgo en el país, y Rocío Andrade Botelli, hija del recordado exalcalde de Lima, Alberto Andrade. Este esfuerzo por tejer alianzas con figuras políticas reconocidas podría ser un movimiento calculado para atraer a un electorado que busca estabilidad y experiencia en tiempos de incertidumbre. La exministra ha hecho hincapié en que los planes de gobierno en los que se ha trabajado no solo son un eco del pasado, sino que están siendo revisados y adaptados para responder a las realidades actuales del país. "Estamos tratando de ver la parte de desarrollo específico, un plan para el sur del país", indicó, lo que pone de relieve la intención de Fuerza Moderna de abordar problemas regionales de manera directa y efectiva. Aunque Molinelli reconoce que el partido es aún "inmaduro", su visión es optimista. Su declaración de que "va a crecer" refleja una convicción de que, con las adecuadas estrategias y alianzas, Fuerza Moderna puede convertirse en una opción viable y competitiva para los electores. Esta perspectiva de crecimiento está alineada con el deseo de muchos peruanos por ver un liderazgo renovado y efectivo en el país. En medio de este panorama, la figura de Kuczynski sigue generando controversia. A pesar de su salida de la presidencia en medio de un escándalo de corrupción y presiones políticas, su experiencia en el cargo podría ser un activo o una carga, dependiendo de cómo se interpreten sus años al mando. La pregunta sobre si los electores están dispuestos a reexaminar su legado es fundamental en la construcción de la narrativa que Fuerza Moderna intentará presentar. La cercanía entre Fuerza Moderna y el legado de Kuczynski también plantea interrogantes sobre las ideologías y estrategias que el partido adoptará. Con el expresidente en el núcleo de la estrategia política del partido, será vital cómo se maneje la comunicación y la presentación de su propuesta ante un electorado que ha demostrado ser cada vez más cauto y crítico. El tiempo dirá si esta fusión de experiencias y nuevas visiones será suficiente para captar la atención de los votantes en el próximo proceso electoral. Sin embargo, lo que queda claro es que el camino hacia las elecciones de 2026 ya se está construyendo, y Fuerza Moderna, bajo el liderazgo de Fiorella Molinelli y la participación de Kuczynski, busca hacer una oferta política que no solo resuene en el presente, sino que también tenga un impacto duradero en el futuro del Perú.