Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
El expresidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, ha vuelto a captar la atención de la opinión pública tras la difusión de un video en el que justifica su reciente regreso a "Waterloo", donde se encuentra exiliado en Bélgica. En un mensaje de ocho minutos, Puigdemont enfatiza que el proceso independentista catalán, conocido como el 'procés', no ha finalizado, a pesar de los cambios políticos en la región. La escenografía del video, que incluye una pared blanca y las banderas catalana y europea, recuerda a su anterior intervención pública, creando un fuerte simbolismo en su discurso. Puigdemont relata que, aunque su intención al regresar a Cataluña era participar en la sesión de investidura de Salvador Illa, las fuerzas policiales estaban preparadas para evitar su acceso al Parlament. Según el expresident, existía un dispositivo organizado por el Departamento de Interior que habría garantizado su detención, lo que le llevó a priorizar su seguridad y eludir una situación que consideraba una entrega voluntaria a la justicia española. El exiliado ha sido claro al afirmar que no pretende entregarse a lo que califica como una autoridad judicial incompetente, que, según él, actúa no desde el interés de impartir justicia, sino desde una agenda política. Este argumento subraya su narrativa de que su lucha por la autodeterminación se inscribe en un marco democrático y legítimo. Además, señala que su regreso tuvo un objetivo más amplio: "denunciar internacionalmente a un Estado español que no se comporta de manera democrática", refiriéndose a lo que considera una burla de las leyes aprobadas por el Congreso. Puigdemont no oculta su descontento con el actual Govern de Cataluña, que, a su juicio, ha colaborado con una estrategia judicial que reprime a los independentistas. La contundencia de su crítica se refleja en su descripción de la situación actual como una "feroz represión" que se ensaña con aquellos que defienden el derecho a la autodeterminación. En este contexto, se muestra solidario con todos los que han sufrido las consecuencias de esta represión, incluyendo a los que enfrentaron cargas policiales durante su breve regreso. Su mensaje se produce en un momento crucial, justo después de la elección de Illa como nuevo presidente de la Generalitat, apoyado por una coalición que incluye al PSC, ERC y Comuns. A pesar de este cambio de gobierno, Puigdemont sostiene que el 'procés' sigue adelante. "El proceso de independencia se acaba con la independencia", enfatiza, marcando una clara distinción entre fases del movimiento y sugiriendo una nueva etapa que, aunque más complicada, no debe ser abandonada. El expresident reconoce las dificultades que presenta la nueva "alianza tripartita" en el Govern catalán, pero hace un llamado a la persistencia y a no renunciar a la lucha por la independencia. "No podemos permitirnos dejarlo estar", sentencia, instando a sus seguidores a actuar con audacia y a asumir riesgos en esta nueva fase del 'procés'. El video y las declaraciones de Puigdemont no solo refuerzan su liderazgo entre los independentistas, sino que también reavivan el debate sobre el futuro del movimiento en un contexto político cambiante. La respuesta del nuevo Govern y la reacción de la sociedad catalana serán elementos clave para determinar cómo se desarrollará esta nueva fase del 'procés'. En conclusión, la figura de Puigdemont sigue siendo un referente en la política catalana, y su mensaje resuena con aquellos que aún albergan esperanzas de independencia. Su resistencia al sistema judicial español y su convicción de que la lucha debe continuar, plantean un escenario complejo en el cual el diálogo, la estrategia y la movilización social jugarán roles fundamentales en los próximos meses. La historia del 'procés' está lejos de concluir, y el regreso de Puigdemont a la esfera pública es un recordatorio de que los desafíos políticos y sociales en Cataluña siguen presentes y en evolución.