Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
Refinería La Pampilla, subsidiaria de la multinacional española Repsol, ha logrado un notable aumento del 20% en su producción de gasolinas tras completar un ambicioso programa de mantenimiento e inversión en sus instalaciones ubicadas en Ventanilla, Callao. Este esfuerzo no solo se traduce en un incremento significativo en la capacidad de producción, sino que también refuerza el compromiso de la empresa con la sostenibilidad y la seguridad en sus operaciones. El director de Refino de Repsol Perú, Julián de la Calle, destacó que este avance es el resultado de un minucioso proceso que abarcó 12 meses de preparación y más de 480,000 horas-hombre dedicadas a asegurar que las instalaciones operaran de la manera más eficiente y segura posible. "Este incremento en la producción de gasolinas limpias, tanto regular como premium, subraya nuestro compromiso por el desarrollo productivo en el Perú", afirmó durante la presentación de los resultados. Uno de los aspectos más destacados de este proyecto ha sido la atención especial a la seguridad. La empresa acumuló un total de 62,000 horas de formación en esta área y logró el objetivo de cero accidentes durante la ejecución de los trabajos. Más de 1,200 profesionales de 42 empresas distintas colaboraron en la realización de estas labores, lo que pone de manifiesto la magnitud y complejidad del mantenimiento realizado. Este esfuerzo, catalogado como la parada de mantenimiento plurianual más grande en la historia de La Pampilla, incluyó el mantenimiento programado de varias unidades productivas en la refinería. A pesar de la magnitud de los trabajos, la empresa garantizó el suministro de combustibles a sus clientes sin interrupciones, gracias a una planificación detallada en la adquisición de combustibles y la gestión de inventarios. Con esta ampliación en la producción, Refinería La Pampilla asegura un abastecimiento de combustibles de calidad, lo que también contribuye a reducir la dependencia del país de las importaciones de gasolinas. Esta estrategia se alinea con las necesidades del mercado local y con los objetivos de sostenibilidad que la compañía ha venido promoviendo en los últimos años. En julio pasado, la refinería había anunciado la instalación de una nueva bomba eléctrica en la unidad de craqueo, como parte de sus planes de mejora tecnológica. Esta iniciativa, que representa una inversión de aproximadamente US$1.3 millones, permitirá optimizar los procesos productivos, reduciendo el consumo de energía y las emisiones de CO2, un paso significativo hacia un modelo de operaciones más responsable con el medio ambiente. Las fuentes de energía para este nuevo sistema provendrán de una subestación eléctrica existente, lo que evita la necesidad de realizar modificaciones en la infraestructura de la refinería. La instalación de esta bomba es solo un componente de un conjunto más amplio de iniciativas que buscan mejorar la eficiencia operativa y minimizar el impacto ambiental de las actividades de la refinería. De acuerdo con los últimos informes, Refinería La Pampilla ha destinado un total de US$7.7 millones a inversiones durante el primer trimestre de 2024. De esta cifra, cerca de US$4.4 millones han sido asignados al proyecto de aumentar la capacidad de producción de gasolinas de bajo azufre, mientras que otros US$3.1 millones se han invertido en mejoras en seguridad e infraestructura. Sin embargo, a pesar del incremento en la producción, el panorama operativo de la refinería no ha estado exento de desafíos. Las ventas han disminuido en un 4.9% en comparación con el año anterior, debido a una caída del 4.7% en los precios de venta impulsada por las menores cotizaciones internacionales. Aun así, la compañía ha visto un ligero aumento del 0.3% en el volumen de ventas, impulsado principalmente por un crecimiento del 11.7% en las ventas nacionales, mientras que las exportaciones se han visto afectadas, registrando una disminución del 44.1%. En conclusión, Refinería La Pampilla se encuentra en una fase de transformación significativa, buscando no solo aumentar su producción y mejorar la calidad de sus combustibles, sino también reafirmar su compromiso con la sostenibilidad y la seguridad en todas sus operaciones. A medida que la compañía continúa avanzando en sus proyectos, el impacto de estas iniciativas será crucial para el desarrollo del sector energético en Perú y para el cumplimiento de las expectativas de un mercado cada vez más exigente en términos de calidad y responsabilidad ambiental.