El presidente Biden se mantiene firme ante las críticas después del intento de asesinato contra Trump.

El presidente Joe Biden ha mantenido firme defensa de sus palabras contra su rival político, el ex presidente Donald Trump, en medio de los acontecimientos tras el intento de asesinato contra la vida de Trump. En su primera entrevista desde el escalofriante incidente, Biden reiteró la importancia de comunicar la amenaza que cree que Trump representa para la democracia, a pesar de enfrentar críticas por su retórica. Durante la entrevista con Lester Holt de NBC, el presidente Biden reconoció que aunque lamenta algunas de sus elecciones de palabras, como decir que era "hora de poner a Trump en el punto de mira" durante una llamada privada con donantes, aclaró que su intención era enfatizar la necesidad de centrarse en las políticas y falsas afirmaciones de Trump en lugar de incitar a la violencia. Abordando preocupaciones sobre su edad y agudeza mental, Biden expresó confianza en su capacidad para liderar el país, señalando sus logros como presidente y el apoyo abrumador que recibió de los votantes en las primarias demócratas. Hizo hincapié en que estaba totalmente comprometido a seguir en la carrera presidencial, a pesar de las llamadas de algunos miembros de su propio partido tras una actuación mediocre en el debate. Tras el intento de asesinato contra la vida de Trump, que resultó en la muerte de una persona y heridas críticas a otras dos, el presidente Biden ha llamado a la desescalada de las tensiones políticas y ha instado a los estadounidenses a "rebajar la temperatura" del discurso político. Sin embargo, varios republicanos han señalado a Biden y otros demócratas, atribuyendo la culpa por incitar el ataque a su retórica, citando específicamente el comentario de Biden sobre el "punto de mira". JD Vance, el recién anunciado compañero de fórmula de Trump, afirmó que la retórica demócrata había llevado directamente al intento de asesinato contra Trump. A pesar de estas acusaciones, el presidente Biden mantuvo que no había participado en la misma retórica incendiaria que su oponente, enfatizando las marcadas diferencias en sus enfoques de liderazgo y democracia. El FBI identificó al pistolero que apuntó al ex presidente Trump como Thomas Matthew Crooks, un trabajador de cocina de 20 años de Pensilvania y registrado como republicano. El personal del Servicio Secreto actuó rápidamente, neutralizando la amenaza al disparar fatalmente a Crooks después de que disparara a Trump durante un mitin en Pensilvania. La firme defensa de las palabras del presidente Biden en medio de los acontecimientos tras el intento de asesinato contra Trump subraya el clima político profundamente polarizado en Estados Unidos, con ambos bandos señalándose mutuamente y participando en acalorados debates sobre el futuro de la democracia y el liderazgo en el país.