Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
Fred Smith, el empresario que salvó de la bancarrota a FedEx apostando en Las Vegas todo lo que tenía a las cartas Fred Smith, el visionario empresario detrás del éxito de FedEx, ha sido noticia por su arriesgada jugada que salvó a la compañía de la bancarrota en sus inicios. Con una flota impresionante de 697 aviones, 210 mil camiones y camionetas, y 600 mil empleados, FedEx entrega diariamente 16,5 millones de paquetes en 220 países y territorios, consolidándose como uno de los principales actores en el sector de repartos y logística a nivel global. A pesar de su actual posición privilegiada, la compañía tuvo un comienzo lleno de obstáculos y momentos críticos, siendo uno de los más notables hace cinco décadas, cuando estuvo al borde de la desaparición. La visión revolucionaria de un joven estudiante de Economía de la Universidad de Yale, Frederick W. Smith, dio origen a la idea de una empresa de mensajería que utilizaría aviones y vehículos terrestres para entregas rápidas de correspondencia y paquetes. A pesar de la falta de entusiasmo inicial por parte de sus profesores, Smith persistió en su idea y en 1971 invirtió una suma considerable de dinero, heredada y conseguida de inversionistas, para fundar Federal Express Corp, que hoy conocemos como FedEx. A pesar de un comienzo modesto, la demanda creció rápidamente, permitiendo a la empresa operar en múltiples ciudades de Estados Unidos en poco tiempo. Sin embargo, los desafíos no tardaron en aparecer. El aumento de los precios del petróleo en 1973 impactó negativamente en las operaciones de la empresa, llevándola a pérdidas mensuales significativas. Ante la negativa de los inversores de seguir apoyando financieramente a FedEx, Smith se vio en una encrucijada que lo llevó a tomar una decisión extrema y polémica: utilizar los últimos fondos de la empresa para apostar en Las Vegas. La fortuna le sonrió a Smith en el mundo del azar, permitiéndole regresar con suficiente dinero para mantener las operaciones de FedEx por una semana más. Aunque esta acción ha sido motivo de controversia y críticas, Smith la ha defendido como un acto necesario para evitar la bancarrota inminente de la empresa. Esta jugada arriesgada, aunque poco convencional, fue un punto de inflexión que permitió a FedEx seguir operando y eventualmente alcanzar la rentabilidad en 1976. A pesar de las críticas y las dudas éticas que rodean la decisión de Smith, algunos expertos sostienen que su valentía al asumir riesgos extremos en momentos críticos fue fundamental para el éxito posterior de la empresa. En un mundo empresarial cada vez más competitivo y volátil, la capacidad de tomar decisiones arriesgadas pero calculadas puede marcar la diferencia entre el fracaso y el triunfo. A medida que FedEx creció y se consolidó como una de las principales empresas estadounidenses, Smith ganó el respeto del mundo empresarial, a pesar de las controversias que rodearon los inicios de la compañía. Aunque las prácticas poco convencionales utilizadas por Smith y su equipo en los primeros años de FedEx pueden suscitar críticas, algunos expertos argumentan que en ciertos contextos y circunstancias extremas, la toma de riesgos puede ser necesaria para garantizar la supervivencia y el crecimiento de una empresa. En última instancia, la historia de Fred Smith y FedEx es un recordatorio de que el camino hacia el éxito empresarial puede estar lleno de obstáculos, decisiones difíciles y momentos de incertidumbre. Si bien las acciones de Smith pueden no ser un modelo a seguir en términos convencionales de buenas prácticas empresariales, su capacidad para asumir riesgos calculados y tomar decisiones audaces en momentos críticos ha dejado una marca indeleble en la historia de FedEx y en el mundo de los negocios.