Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
El miércoles pasado, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, y el líder de Corea del Norte, Kim Jong Un, firmaron un acuerdo que ha despertado preocupación en Occidente. Este acuerdo, que incluye un compromiso de defensa mutua entre ambos países, refuerza su cooperación militar y ha sido calificado por Kim Jong Un como una "alianza" estratégica integral. Durante una conferencia de prensa poco común en Pyongyang, Kim Jong Un anunció la firma de esta asociación, destacando que su país apoya plenamente la guerra de Rusia contra Ucrania. Esta alianza ha sido celebrada con una fastuosa bienvenida, donde las calles de Pyongyang fueron decoradas con banderas de ambos países y retratos gigantes de Putin. El presidente ruso, por su parte, señaló que el tratado firmado prevé una asistencia mutua en caso de agresión a una de las partes, y además dejó entrever la posibilidad de una cooperación militar-técnica con Corea del Norte. Putin destacó que esta alianza se da en un contexto en el que ambos países luchan contra lo que él denominó como las prácticas hegemónicas y neocolonialistas de Estados Unidos y sus aliados. La visita de Putin a Corea del Norte ha sido observada de cerca por Seúl y Washington, quienes han expresado su preocupación por los crecientes lazos militares entre Rusia y Corea del Norte. En este sentido, China, histórico aliado de Corea del Norte, ha mantenido una reacción discreta ante este acuerdo. Kim Jong Un ha destacado que este pacto ampliará la cooperación en los ámbitos de la política, la economía y la defensa, asegurando que es estrictamente pacifista y defensivo. Putin, por su parte, ha agradecido el apoyo incondicional de Corea del Norte a las políticas rusas, incluyendo la guerra en Ucrania. Rusia y Corea del Norte, aliados desde el final de la Guerra de Corea en la década de 1950, han fortalecido sus lazos en medio de la invasión rusa de Ucrania. Esta alianza se ha vuelto crucial para ambas partes, ya que Rusia busca apoyo en materia de armamento debido a la guerra en Ucrania, mientras que Corea del Norte necesita asistencia en alimentación, energía y armas de punta para aliviar la presión por las sanciones internacionales. La firma de este acuerdo ha generado preocupación en Estados Unidos, que ha expresado su inquietud por las implicancias para la seguridad de Corea del Sur y Ucrania. Además, Pyongyang ha desestimado las acusaciones de suministrar armas a Rusia como "absurdas". En medio de este escenario, este acuerdo entre Rusia y Corea del Norte marca un nuevo capítulo en las relaciones internacionales, desafiando la hegemonía occidental y reconfigurando el equilibrio de poder en el panorama global. Mientras tanto, la comunidad internacional observa con atención cómo esta alianza podría impactar en la estabilidad regional y global.