La Comisión de Energía y Minas aprueba extensión de contratos petroleros

La Comisión de Energía y Minas del Congreso ha aprobado un importante dictamen de ley que podría tener un impacto significativo en la industria petrolera del país. Con 11 votos a favor y uno en contra, se ha dispuesto extender los plazos de los contratos petroleros, que actualmente tienen una duración máxima de 30 años, a un máximo de 40 años. Esta medida, de ser aprobada en el pleno, modificaría el artículo 22 de la Ley Orgánica de Hidrocarburos, alineando los plazos de exploración y explotación de hidrocarburos con los de los contratos de gas natural, que ya tienen una duración de hasta 40 años. El autor de este proyecto, el congresista Carlos Alva, ha señalado que esta ley busca reactivar las inversiones en la industria nacional de hidrocarburos en un contexto de aumento de los precios internacionales del petróleo. De ser aprobada y promulgada, esta medida no solo aplicaría a los nuevos contratos, sino también a aquellos que actualmente están en vigor. Los titulares de estos contratos tendrían la posibilidad de solicitar una extensión por diez años, llegando así a un total de 40 años de duración. Sin embargo, la extensión de los contratos no sería automática y estaría sujeta a que el concesionario presente un programa de inversiones a Perupetro S.A., la agencia estatal correspondiente. Durante el debate en la comisión, se acordó incorporar una propuesta que incluye los resultados de negociaciones directas entre Perupetro y el contratista, así como otros aspectos que la agencia determine, considerando las diferencias geológicas y de ubicación de los lotes petroleros en el país. Otro cambio importante introducido por este dictamen es la autorización para que Perupetro pueda retener los hidrocarburos producidos por el contratista hasta que este haya pagado las regalías correspondientes. Esta retención se consideraría como un pago en especies, permitiendo a Perupetro comercializar los hidrocarburos retenidos para generar ingresos para el Estado. Expertos en el sector, como Carlos Gonzáles, han destacado que este cambio en la ley corregiría una diferenciación errónea introducida en 1987, que limitaba la duración de los contratos de gas natural a 40 años, mientras que los de petróleo tenían un límite de 30 años. Esta corrección eliminaría obstáculos para la explotación conjunta de petróleo y gas en un mismo yacimiento, lo que se consideraba técnicamente inviable bajo la normativa actual. Por otro lado, César Gutiérrez, ex presidente de Petroperú, ha expresado que esta modificación llega en un momento algo tardío, ya que la propuesta inicialmente buscaba beneficiar a los lotes del noroeste del país cuyos contratos estaban próximos a vencer. Sin embargo, muchos de estos contratos ya han sido transferidos a Petroperú o licitados en condiciones que involucran la participación de la petrolera estatal, lo que limita el impacto inmediato de esta medida en dichos contratos. En resumen, la aprobación de este dictamen de ley representa un paso importante para reactivar las inversiones en la industria nacional de hidrocarburos y alinear los plazos de los contratos petroleros con los de gas natural. Aunque todavía debe pasar por el pleno del Congreso, esta medida podría tener implicaciones significativas en la producción y exploración de hidrocarburos en el país, generando un ambiente más propicio para el desarrollo de la industria petrolera peruana.