Anunciados cargos contra Thaksin Shinawatra por lesa majestad: el futuro político de Tailandia en juego

La Oficina del Fiscal General de Tailandia ha anunciado que presentará cargos formales contra el ex primer ministro Thaksin Shinawatra por el delito de lesa majestad, un delito castigado en el país con entre 3 y 15 años de prisión. Esta noticia ha sacudido nuevamente el escenario político tailandés, ya que Thaksin regresó al país en agosto pasado después de 15 años en el exilio autoimpuesto. La denuncia en su contra está relacionada con unas declaraciones hechas en 2015 contra el Consejo Privado de la Casa Real de Tailandia durante una entrevista a una agencia de noticias surcoreana. En dichas declaraciones, Thaksin Shinawatra afirmó que el organismo monárquico estaba detrás del golpe de Estado militar de mayo de 2014 que derrocó al gobierno de su hermana menor, Yingluck Shinawatra. La Fiscalía considera que estas afirmaciones podrían constituir un delito conforme a la ley tailandesa, a pesar de haber sido realizadas fuera del país. Este anuncio se produce después de una larga investigación por parte de las autoridades, que notificaron formalmente a Thaksin en enero. Thaksin, una figura central en la política tailandesa durante las últimas décadas, regresó al país el año pasado y fue enviado directamente a prisión para cumplir condenas previas por corrupción y abuso de poder. Sin embargo, debido a razones de salud, fue trasladado a arresto domiciliario en febrero. Durante su estancia en el hospital, recibió un perdón real que redujo su condena de ocho años a uno, que cumplirá en agosto de este año. El regreso de Thaksin coincide con la formación de un nuevo Gobierno liderado por el partido Pheu Thai, vinculado al clan Shinawatra, lo que ha sido interpretado como una señal de reconciliación entre la élite promilitar y promonárquica del país y el círculo del ex primer ministro. Thaksin, quien fue derrocado en un golpe de Estado en 2006 y ha mantenido su influencia política desde el exilio, es considerado por muchos como el enemigo número uno de Tailandia. Estos últimos acontecimientos han generado tensiones en el país, donde el tema de la monarquía es extremadamente delicado y está protegido por estrictas leyes de lesa majestad. La acusación contra Thaksin Shinawatra plantea una vez más la compleja relación entre el poder político y la institución monárquica en Tailandia, un país donde las tradiciones y la política están estrechamente entrelazadas. La fecha programada para presentar la demanda ante un tribunal es el 18 de junio, luego de que se aceptara un aplazamiento solicitado por el representante legal de Thaksin debido a su estado de salud por la covid-19. Este caso seguirá siendo seguido de cerca por la opinión pública y los analistas políticos, ya que podría tener profundas implicaciones en el futuro político de Tailandia y en su relación con la monarquía.