Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
El agro peruano, considerado un milagro en lo social y económico, se enfrenta a una serie de desafíos que ponen en peligro su continuidad y su impacto positivo en la economía nacional. La Confederación Nacional de Instituciones Empresariales Privadas (Confiep) ha señalado la urgencia de implementar una política sectorial ad hoc para encaminar la recuperación de este importante sector. El agro peruano es un referente global que deja anualmente en la economía regional y nacional una suma considerable de S/ 36,000 millones en pagos de salarios, proveedores e impuestos, lo que se traduce en mejores condiciones de vida para los peruanos. Sin embargo, desde el año 2020, diversos factores han impactado negativamente en la actividad agraria. El año pasado, las medidas tomadas para hacer frente a la pandemia generaron importantes sobrecostos en el trabajo agrario, afectando la economía de las empresas. La abrupta derogación de la Ley de Promoción Agraria y la imposición de cargas antitécnicas han restado competitividad al sector, que opera en zonas con escasa infraestructura y servicios públicos y privados. En el 2021, la crisis de los contenedores incrementó los costos de fletes refrigerados, reduciendo los márgenes de los agroexportadores. Este año, la guerra entre Rusia y Ucrania afectó la producción mundial de urea, generando desabastecimiento y elevando los costos de sustitutos de manera exponencial. Además, las paralizaciones de carreteras en Ica y La Libertad, sumadas a las condiciones climáticas adversas por el fenómeno de El Niño costero, han afectado gravemente la producción y la productividad del sector. Ante este panorama, es necesario implementar una política sectorial específica que permita al agro peruano recuperarse de estos desafíos. La Confiep ha mencionado la importancia de solicitar la opinión del sector privado para asegurar la efectividad de las medidas anunciadas. Más de un millón de peruanos dependen del empleo generado por esta actividad, por lo que es fundamental garantizar su sostenibilidad y desarrollo. En este sentido, es imperativo que las autoridades tomen acciones concretas y efectivas para respaldar al agro peruano, considerado un pilar fundamental de la economía nacional. El futuro del sector y el bienestar de miles de familias peruanas están en juego, por lo que es crucial actuar de manera coordinada y decidida para impulsar su recuperación y desarrollo.