El auge del gaming en Latinoamérica: de pasatiempo a profesión rentable

La revolución que han experimentado los videojuegos en la última década es innegable, y su impacto en el ámbito económico se ha vuelto significativo. En Latinoamérica, la industria del gaming alcanzó la impresionante cifra de 8,600 millones de dólares en 2023, y las proyecciones globales para este año apuntan a un valor de 187,700 millones de dólares. Este crecimiento no solo refleja el aumento en la cantidad de jugadores, sino también la creciente aceptación de los videojuegos como una forma legítima de generar ingresos. Para muchos, ser gamer y creador de contenido en plataformas como YouTube ya no es simplemente una afición, sino una carrera profesional. Los creadores de contenido han encontrado en el gaming una manera de combinar su pasión por los videojuegos con la posibilidad de obtener ingresos. Según informes de YouTube, la categoría de videojuegos es una de las que más compromiso genera entre los espectadores, lo que resalta la importancia de este nicho en el mercado digital. Pero, ¿cómo se monetiza un canal de videojuegos en YouTube? Las condiciones son claras y están al alcance de muchos. Para ser parte del Programa de Partners de YouTube, los creadores deben contar con al menos 500 suscriptores, tres videos subidos en los últimos 90 días y cumplir con alguno de los umbrales de visualización que la plataforma exige. Esto democratiza la posibilidad de que cualquier gamer con talento y dedicación pueda convertir su pasión en una fuente de ingresos. Las formas de monetización son variadas y pueden incluir ingresos publicitarios, venta de mercancía, así como donaciones a través de super chats y stickers. Santiago Baranda, líder de creadores de videojuegos en YouTube, enfatiza que el gaming ha llegado al mainstream, capturando la atención de las generaciones más jóvenes, donde una gran mayoría de la Gen Alpha y Z se siente identificada con esta cultura. Además de YouTube, los gamers tienen otras opciones para monetizar su contenido. En juegos como Roblox, la youtuber peruana RoxieCake ha encontrado una forma innovadora de generar ingresos mediante su programa de Video Stars, que le permite crear y monetizar objetos dentro del juego. Este enfoque no solo ofrece una plataforma para los creadores, sino que también les permite interactuar de forma más efectiva con sus seguidores. El argentino Matías Ángel Cersosimo, conocido como Cerso, lleva esta idea aún más lejos, creando mundos en sus juegos que pueden ser vendidos, ofreciendo una nueva fuente de ingresos. Esta tendencia destaca un aspecto crucial del gaming: la capacidad de innovar y generar riqueza a partir de la creatividad y las habilidades de los jugadores. No son solo estos dos casos; hay múltiples títulos como Clash Royale, Brawl Stars y Fortnite que han implementado programas de creadores, cada uno con sus propios criterios de elegibilidad. Esta diversidad de opciones permite a los gamers explorar distintas vías para monetizar su contenido, lo que amplía aún más las posibilidades de éxito en este campo. La comunidad gamer, a su vez, se beneficia de esta monetización. Los creadores pueden colaborar con otros youtubers a nivel internacional, lo que les permite crecer y expandir su audiencia. Esta interacción entre creadores no solo fortalece sus comunidades, sino que también enriquece la experiencia de los seguidores, quienes obtienen acceso a contenido diverso y de calidad. Así, la actividad de jugar videojuegos y crear contenido se ha transformado en un trabajo serio y viable en el contexto actual. La convergencia entre la pasión por los videojuegos y la posibilidad de obtener ingresos ha convertido a muchos gamers en profesionales del entretenimiento digital, marcando el inicio de una nueva era en la que el gaming es una carrera y no simplemente un pasatiempo. En este entorno, cada vez más personas están descubriendo que el camino hacia el éxito puede estar, literalmente, a un clic de distancia.