Romantizando la violencia: cómo un asesinato desató un perturbador culto a la personalidad.

Romantizando la violencia: cómo un asesinato desató un perturbador culto a la personalidad.

El asesinato del CEO de UnitedHealthcare, Brian Thompson, ha llevado a una inquietante admiración casi de culto hacia su asesino no identificado, lo que ha generado preocupaciones de seguridad.

Juan Brignardello Vela, asesor de seguros

Juan Brignardello Vela

Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.

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En un giro sorprendente de los acontecimientos tras el trágico asesinato de Brian Thompson, el CEO de UnitedHealthcare, parece estar desarrollándose un perturbador culto a la personalidad en torno a su asesino no identificado. Thompson, un hombre de familia y ejecutivo respetado, fue asesinado a tiros en una acera de Midtown Manhattan en la madrugada del miércoles, lo que provocó una inmediata caza del hombre por parte de las fuerzas del orden. Sin embargo, a medida que han pasado los días, un segmento del público parece estar más inclinado a glamorizar al tirador que a ayudar en su captura. El atacante, que sigue prófugo, ha sido retratado en los medios como una figura sombría, con una imagen borrosa de su rostro que ha provocado comparaciones con los galanes de Hollywood. Su chaqueta distintiva, similar a la que aparece en los carteles de búsqueda policial, ha pasado a ser un artículo popular entre algunos compradores. Sin embargo, son las escalofriantes palabras encontradas inscritas en las cápsulas de bala en la escena—"deponer", "negar" y "retrasar"—las que han despertado una preocupante fascinación entre ciertos individuos, resonando profundamente con los agravios contra la industria del seguro de salud. Mientras las autoridades han emitido llamados urgentes para ayudar a capturar al tirador, las redes sociales han visto un torrente de apoyo hacia el atacante. Algunos usuarios han convertido las palabras inscritas en un grito de batalla, reflejando las frustraciones generalizadas respecto a las prácticas de atención médica y la mala conducta corporativa. Mientras tanto, el albergue de Upper West Side que se cree albergó al sospechoso ha enfrentado una ola de críticas negativas en línea, con clientes despreciando al personal como "narcs" por cooperar con las fuerzas del orden. A pesar de las graves implicaciones de tal narrativa, el discurso en torno a la muerte de Thompson se ha desplazado en gran medida hacia una crítica del sistema de salud en lugar de una condena a la violencia que le costó la vida. Los expertos han expresado alarma ante la forma en que el caso ha trascendido las dinámicas del crimen tradicional hacia un espacio donde el tirador está siendo glorificado en lugar de vilipendiado. Alex Goldenberg, un asesor senior en el Instituto de Investigación de Contagio en Redes, señaló que la conversación en línea ha reflejado patrones típicamente observados en la glorificación de tiradores en masa en sitios marginales. Describió la situación como "perturbadora", destacando que un considerable compromiso en línea ha favorecido publicaciones que apoyan el asesinato o menosprecian a la víctima. Las implicaciones de enmarcar este acto de violencia como una rebelión simbólica en una "guerra de clases más amplia" podrían alentar actos similares, elevando las apuestas para la seguridad pública. En un espectáculo alarmante, un concurso de imitadores del tirador atrajo recientemente a una multitud en Washington Square Park, con participantes vistiendo chaquetas adornadas con las controvertidas frases. El ganador, un empleado de un sindicato de 39 años, expresó orgullo por las acciones del tirador, afirmando que resaltaban el sufrimiento experimentado bajo el sistema de seguros de salud. Tales sentimientos solo han intensificado las preocupaciones de seguridad entre los ejecutivos corporativos, particularmente en los sectores farmacéutico y de seguros. A raíz de la muerte de Thompson, se están reevaluando las medidas de seguridad, enfatizando la naturaleza precaria del liderazgo en industrias a menudo bajo el fuego de la atención pública. En una manifestación inquietante del discurso en curso, se ha visto graffiti con las palabras "negar", "defender" y "deponer" a más de 100 millas de distancia en Filadelfia, señalando que la narrativa en torno al asesinato de Thompson ha ganado tracción más allá de la ciudad de Nueva York. A medida que continúa la caza del hombre, la pregunta sigue siendo: ¿cómo un brutal acto de violencia dio lugar a una preocupante veneración del perpetrador? Este fenómeno inquietante refleja no solo las frustraciones sociales con el sistema de salud, sino que también destaca una creciente tendencia a romantizar la violencia, lo que plantea un desafío significativo para las fuerzas del orden y la seguridad comunitaria en el futuro.

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