Caída del 3,4% en ventas de vehículos premium en Perú marca un año incierto

La situación del mercado de vehículos premium en Perú ha sido objeto de análisis en los últimos meses, y los resultados hasta julio de 2023 reflejan una contracción del 3,4% en la venta de nuevos vehículos en comparación con el mismo periodo del año anterior, según datos proporcionados por la Asociación Automotriz del Perú (AAP). Este descenso, aunque preocupante, se produce en un contexto de recuperación económica tras los estragos de la pandemia y una mayor demanda y oferta que caracterizaron el año pasado. Antonio Rivera, gerente general de BMW Group Perú, subraya que el crecimiento experimentado en 2022 no ha podido sostenerse en 2023, evidenciando las fluctuaciones en el mercado automotriz. La disminución en el sector premium es menos severa que la caída registrada en el segmento de vehículos livianos, que reporta un descenso del 13,5%. Mike Pariamachi, gerente de Negocio de Autos de Divemotor, menciona que el mercado premium ha demostrado ser más resistente a la crisis actual. Sin embargo, expertos como Willard Manrique, de la Universidad de Piura, advierten que la recuperación del consumo y la confianza del consumidor a nivel local aún no son óptimas, lo cual podría complicar las proyecciones para el resto del año. En medio de esta incertidumbre, las proyecciones para el segmento premium no son del todo alentadoras. Alejandro Ruiz de Somocurcio, gerente de marcas Premium de Gildemeister, junto con otros ejecutivos del sector, anticipan un cierre del año con niveles de ventas similares a los de 2023. Sin embargo, el espectro de una contracción adicional de entre el 1% y el 3% sigue presente, lo que sugiere que el camino hacia la recuperación será paulatino. Manrique estima que los niveles de venta del segmento premium podrían alcanzar cifras prepandemia entre 2025 y 2026, dependiendo de la estabilización de las cadenas de suministro y la recuperación de la confianza del consumidor. En este contexto, algunas marcas han logrado destacarse. Mercedes-Benz, por ejemplo, ha reportado un crecimiento del 16,7% hasta julio, convirtiéndose en la única marca del top 3 que no ha retrocedido en ventas. Pariamachi atribuye este éxito a una ampliación de su portafolio, así como a la demanda específica por sus vehículos de alta gama, que se fortalecen con estrategias de marketing innovadoras, como la experiencia de conducción en un circuito de Fórmula 1. El enfoque de Mercedes-Benz en su línea Top-L, que incluye submarcas de lujo como Maybach y modelos deportivos AMG, ha permitido mantener un flujo constante de ventas. Los precios de entrada para los vehículos AMG oscilan entre los US$100,000 y los US$300,000, lo que demuestra que el segmento de lujo sigue siendo atractivo para un nicho de mercado dispuesto a invertir en exclusividad y calidad. Por su parte, Volvo ha sorprendido con un crecimiento notable del 49,3% y espera vender alrededor de 600 unidades este año. Con un enfoque claro en la transición hacia un portafolio 100% eléctrico para 2050, la marca ha comenzado a ofrecer exclusivamente vehículos electrificados en América Latina, incluyendo el mercado peruano. Actualmente, cerca del 50% de sus ventas corresponden a modelos híbridos enchufables o eléctricos, y se prevé que este porcentaje aumente al 80% hacia finales de año. Jaguar Land Rover, aunque con proyecciones más limitadas, también se posiciona en el mercado con un ticket promedio de US$100,000, buscando ofrecer una experiencia más exclusiva a sus consumidores. Sin embargo, la marca BMW, que lidera el sector premium en Perú, ha experimentado una caída del 10,9% en sus ventas, aunque Rivera se muestra optimista respecto a mantener su primer lugar gracias a un portafolio diversificado que incluye modelos de gasolina, híbridos y eléctricos. La caída de Mini, que alcanzó un 36,7%, es atribuida a un récord histórico de ventas en 2022, lo que evidencia las dinámicas fluctuantes del mercado. La falta de unidades disponibles para la venta ha limitado el crecimiento de la marca, lo que plantea desafíos en la gestión de inventarios y la oferta en el mercado. En resumen, el panorama del mercado de vehículos premium en Perú actualmente refleja un entorno desafiante, donde las marcas deben adaptarse a las condiciones del mercado y a las expectativas de los consumidores. La recuperación del sector, aunque posible, dependerá de factores tanto internos como externos, y los próximos años serán clave para determinar cuándo se alcanzarán nuevamente los niveles previos a la pandemia. Con una combinación de innovación, calidad y un enfoque en la sostenibilidad, el sector premium podría encontrar en la adversidad una oportunidad para redefinir su camino hacia el futuro.