Claudia Sheinbaum ante desafíos económicos en México: retos y estrategias

Claudia Sheinbaum, la recién electa presidenta de México, se enfrenta a una serie de desafíos económicos que requerirán una gestión cuidadosa y estratégica para mantener la estabilidad financiera del país en los próximos años. Entre los retos más urgentes se encuentran la disminución del déficit fiscal, la necesidad de transformar el modelo de negocio de Pemex y la preparación para la revisión del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) en 2026. En un contexto en el que el déficit fiscal ha alcanzado niveles récord en los primeros meses del año, superando los 377,540 millones de pesos y con una deuda pública que ha incrementado un 10.7% respecto al año anterior, resulta imperativo que se implementen medidas para fortalecer la Hacienda Pública y garantizar la sostenibilidad fiscal en el mediano y largo plazo. Para lograr un equilibrio presupuestario, diversos expertos han señalado la necesidad de aumentar los ingresos y repensar la asignación de recursos públicos, priorizando programas sociales, inversión en infraestructura y una reforma fiscal integral que permita generar ingresos de manera sostenible y equitativa. La propuesta de Sheinbaum de garantizar los programas sociales del Bienestar, ampliarlos y aumentar la inversión en infraestructura, es un paso en la dirección correcta, sin embargo, será fundamental que estas acciones se complementen con una revisión exhaustiva de la política fiscal y una mayor eficiencia en la recaudación de impuestos. La transformación de Pemex, una de las empresas clave para la economía mexicana, también será un tema prioritario en la agenda de Sheinbaum. La necesidad de modificar el modelo de negocio de la empresa petrolera para hacerla más eficiente y rentable, así como fortalecer la soberanía energética del país, requerirá de decisiones estratégicas y una reestructuración financiera sólida. En cuanto a la revisión del T-MEC en 2026, Sheinbaum deberá prepararse para posibles escenarios que podrían surgir en el contexto geopolítico actual, especialmente en caso de una eventual victoria de Donald Trump en las elecciones estadounidenses. La estabilidad de la relación comercial entre México y Estados Unidos es vital para la economía mexicana, por lo que será crucial mantener un diálogo abierto y constructivo con las autoridades estadounidenses. En definitiva, el mandato de Claudia Sheinbaum estará marcado por la necesidad de tomar decisiones estratégicas y contundentes en materia económica para garantizar la estabilidad financiera y el crecimiento sostenible de México en un entorno global cada vez más complejo y desafiante. Su capacidad de liderazgo y su visión a largo plazo serán determinantes para afrontar con éxito los retos que se presentan en el horizonte económico del país.