Escándalo financiero salpica a presidenta Dina Boluarte: UIF revela depósitos sospechosos por S/1.1 millones.

La presidenta de la República, Dina Boluarte, se encuentra en el ojo del huracán tras la revelación de que recibió en sus cuentas bancarias la suma de S/1.1 millones de origen desconocido, según información proporcionada por la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Superintendencia de Banca y Seguros (SBS). A pesar de las sospechas generadas por los movimientos financieros detectados, Boluarte ha defendido la legitimidad de sus ingresos, afirmando que todo lo que posee es fruto de su esfuerzo y trabajo. Sin embargo, el informe de inteligencia financiera revela que los abonos en efectivo y transferencias recibidas por la mandataria entre los años 2016 y 2022 carecen de una justificación económica que las respalde, lo que ha levantado preocupaciones sobre posibles actividades relacionadas con lavado de activos. La pesquisa de la UIF detalla los depósitos realizados en las cuentas de Boluarte, tanto individuales como mancomunadas, llegando a la cifra total de S/1.1 millones. Destaca especialmente la cuenta compartida con Néstor Amado Camargo, con quien la presidenta compartió la dirección del Club Departamental Apurímac, donde se registraron abonos significativos, especialmente durante el año 2018, período en el que Boluarte postuló a la Alcaldía de Surquillo por Perú Libertario. Asimismo, se han identificado transferencias desde una de las cuentas mancomunadas de Boluarte hacia Vladimir Cerrón, prófugo fundador de Perú Libre, para el pago de una reparación civil por un caso de corrupción. Estos movimientos financieros han puesto en entredicho la transparencia de las acciones de la mandataria, especialmente en relación con su gestión en el Club Departamental Apurímac y sus vínculos con afiliados de Perú Libre. La adquisición de una camioneta Honda CR-V en 2018, por un monto de US$25,990, también ha levantado sospechas debido al origen desconocido de los fondos utilizados para su compra, así como la falta de coherencia entre los ingresos declarados por Boluarte y los montos depositados en sus cuentas bancarias. Ante estas revelaciones, diversas figuras públicas han manifestado su preocupación por la posible comisión de delitos financieros por parte de la presidenta y han destacado la necesidad de esclarecer los hechos para garantizar la transparencia y legalidad en el ejercicio del poder. Hasta el momento, los representantes legales de Dina Boluarte han optado por el silencio ante las solicitudes de comentarios, mientras que desde Palacio de Gobierno aún no se ha emitido ninguna declaración al respecto. La sociedad peruana aguarda con atención el desenlace de esta investigación, que pone en entredicho la integridad y la ética en la gestión de los recursos públicos.