La complejidad de la economía: Un camino hacia el desarrollo y el bienestar

La complejidad de la economía: Un camino hacia el desarrollo y el bienestar

La diversificación productiva hacia sectores de alta tecnología impulsa el desarrollo y el bienestar económico. El Índice de Complejidad Económica revela la importancia de esta transformación para países como Costa Rica y México, que han logrado avanzar en la generación de empleos de calidad y la mejora de su competitividad internacional. La presentación del Proyecto de Ley 7065/2023-CR busca fortalecer esta tendencia, incentivando la inversión extranjera y la industrialización a través del REMA. Avanzar hacia economías más complejas es crucial para alcanzar niveles superiores de desarrollo.

Juan Brignardello Vela, asesor de seguros

Juan Brignardello Vela

Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.

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La complejidad de la economía: Un camino hacia el desarrollo y el bienestar Uno de los indicadores económicos menos conocidos pero más reveladores es el Índice de Complejidad Económica (ICE), desarrollado por los profesores Ricardo Haussman, de la Universidad de Harvard, y César Hidalgo, del Massachusset Institute of Technology (MIT). Este índice nos ofrece un panorama del grado de desarrollo y sofisticación productiva de un país en un momento dado, mostrando la importancia de la diversificación de la economía para alcanzar mayores niveles de bienestar y desarrollo. Las economías menos complejas suelen depender de industrias extractivas como la pesca o la minería, mientras que aquellas más complejas se basan en sectores como la biotecnología, la industria farmacéutica, la aeronáutica o la robótica. La capacidad de un país para evolucionar hacia actividades de mayor complejidad productiva se refleja en su crecimiento económico y en la calidad de vida de sus ciudadanos. El ICE nos permite comparar el desarrollo económico de diferentes países a lo largo del tiempo, evidenciando la transformación de economías que han apostado por la diversificación y la sofisticación de su oferta exportadora. Ejemplos como los Tigres Asiáticos, Corea del Sur, y más recientemente países como Malasia, Indonesia o Vietnam, muestran cómo la apuesta por la producción de bienes y servicios de alta tecnología ha sido clave en su desarrollo. En América Latina, países como Costa Rica y México han seguido una senda similar, atrayendo inversiones en sectores de alta tecnología que han generado empleos de calidad y fomentado el desarrollo de habilidades técnicas. Costa Rica ha logrado superar la dependencia de las materias primas mediante un enfoque en la tecnología avanzada y la manufactura especializada, mientras que México ha atraído inversiones significativas en sectores como el automotriz, generando empleo y contribuyendo positivamente al PIB. En este contexto, la presentación del Proyecto de Ley 7065/2023-CR en el Congreso de la República busca promover el desarrollo industrial, las exportaciones de servicios y la generación de empleo a través del Régimen de Elaboración, Manufactura o Maquila y de Almacenamiento (REMA). Este proyecto propone un marco legal para incentivar la inversión extranjera, fomentar la industrialización y mejorar la competitividad internacional, apostando por la diversificación de la economía y la generación de valor agregado. La promoción de una economía más compleja a través del fomento de sectores de alta tecnología y la creación de empleos de calidad es fundamental para el desarrollo y el bienestar de un país. La experiencia de países que han apostado por la diversificación productiva nos muestra que es posible transformar la estructura económica y alcanzar niveles de desarrollo superiores. Es necesario seguir avanzando en esta dirección para construir economías más sólidas y prósperas en beneficio de toda la sociedad.

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