Joti Harriague: La diseñadora argentina que conquista la moda en Uruguay

La historia de Joti Harriague, conocida en el mundo de la moda como Josefina, es un claro ejemplo de cómo la pasión y la dedicación pueden abrir puertas en el competitivo universo del diseño. Desde sus días de infancia, rodeada de ropa y telas en el taller de su madre, Joti encontró en la moda su vocación. A sus 33 años, ha logrado no solo consolidar su marca, sino también vestir a algunas de las personalidades más influyentes de Argentina. Recientemente, Harriague ha dado un paso significativo en su carrera con la apertura de un nuevo local en Manantiales, Uruguay. Este espacio no solo representa una nueva etapa para la diseñadora, sino que también simboliza el reconocimiento que ha ganado en la industria. "La moda siempre fue parte de mi vida y de mi esencia. Hoy por hoy todo gira en torno a eso", expresa con entusiasmo. Su formación en la Universidad de Buenos Aires (UADE), complementada con cursos de marketing digital y moldería avanzada, la ha preparado para enfrentar los desafíos del mundo del diseño. La carrera de Joti no fue un camino fácil. Al principio, era una emprendedora que llevaba a cabo cada aspecto de su negocio, desde la creación de las prendas hasta la gestión de su página web. "Cuando empecé con el proyecto de mi marca yo hacía todo, desde el producto y las fotos hasta mi propia web", recuerda. Sin embargo, su esfuerzo personal y su deseo de aprender la llevaron a establecer una marca que rápidamente comenzó a captar la atención de figuras relevantes en el mundo de la moda. Por casualidad o destino, su trabajo empezó a ser notado por celebridades. "Arranqué vistiendo a influencers y se transformó en una cadena enorme", dice orgullosa. Hoy, cuenta entre sus clientas a figuras como Pampita, Mery del Cerro y Emilia Attias, quienes eligen sus diseños por su singularidad y su capacidad para fusionar la moda con el arte de manera elegante. "Creo que es el resultado del foco en la creatividad, que funcionó desde un principio", añade. Uno de los momentos más destacados en su carrera fue el reciente encargo de diseñar un vestido para Antonela Roccuzzo, la esposa de Lionel Messi. Este desafío representaba no solo un hito personal, sino también un reconocimiento a su incansable labor. "La tuve que ir a atender personalmente a Rosario. Ella una divina. Siento que no puedo aspirar mucho más después de ella", confiesa Joti, quien creó un vestido largo verde con detalles cut out, capturando la esencia de su estilo audaz. A pesar de los éxitos, Joti sigue sintiendo la presión de mantenerse relevante en un mundo donde las tendencias cambian rápidamente. "Intento proponer constantemente lo nuevo y mi público busca eso. Creo que mi marca tiene una esencia arriesgada y muy personal", comenta. Su capacidad para innovar y mantenerse al tanto de las tendencias internacionales la han posicionado como una referente en la moda argentina. El nuevo local en Manantiales no solo refleja su crecimiento, sino que también ha sido recibido con entusiasmo por parte de sus seguidores. "Las expectativas eran estándar como todo negocio nuevo, pero superó mis expectativas, de hecho explotó", dice, visiblemente emocionada. Este éxito la motiva a seguir explorando nuevas oportunidades y a expandir su marca en otros mercados. Con la mirada fija en el futuro, Joti Harriague no se detiene. "Con respecto a lo que se viene, hay propuestas en puerta, así que probablemente pronto podamos desembarcar en otro país", asegura. Su historia es un recordatorio de que con esfuerzo, creatividad y un poco de audacia, los sueños pueden hacerse realidad, incluso en el competitivo mundo de la moda.