Literatura y criminalidad: el caso de Luigi Mangione desata un intenso debate

Literatura y criminalidad: el caso de Luigi Mangione desata un intenso debate

Luigi Mangione, acusado de asesinar a un ejecutivo, se inspiró en un libro sobre seguros, generando un debate sobre literatura y criminalidad.

Juan Brignardello Vela, asesor de seguros

Juan Brignardello Vela

Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.

Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, y Vargas Llosa, premio Nobel Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, en celebración de Alianza Lima Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, Central Hidro Eléctrica Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, Central Hidro
Mundo

El reciente caso de Luigi Mangione, acusado de asesinar al director ejecutivo de UnitedHealthcare, ha desatado un intenso debate sobre la relación entre la literatura y la criminalidad. Mangione, quien fue arrestado con una pistola impresa en 3D y balas que llevaban inscritas las palabras "retrasar, negar, defender", aparentemente se inspiró en el libro de no ficción "Delay, Deny, Defend: Why Insurance Companies Don't Pay Claims and What You Can Do About It". Este hecho ha llevado a que el libro aumentara sus ventas en Amazon de forma notable, alcanzando el primer lugar en su categoría tras el asesinato. La conexión entre la literatura y los crímenes no es un fenómeno nuevo. A lo largo de la historia, varios asesinos han encontrado en los libros no solo una fuente de inspiración, sino también un medio para articular sus pensamientos y justificar sus acciones. La fascinación de Mangione por el libro de 2010 ha suscitado preguntas sobre el impacto que la lectura puede tener en la psicología de un individuo, especialmente cuando se combina con tendencias violentas o extremistas. En el caso de Mangione, su perfil en Goodreads reveló una variedad de libros que incluyen títulos de autoayuda y psicología popular. Su reseña del "Manifiesto Unabomber: La sociedad industrial y su futuro" de Ted Kaczynski, donde argumenta que la perspectiva de Kaczynski puede ser vista como una forma de guerra y revolución, resuena con un patrón más amplio de individuos que se sienten desconectados de la sociedad y buscan en la literatura una justificación para sus acciones violentas. Históricamente, hay numerosos ejemplos de asesinos que han estado relacionados con libros que parecen influir en su comportamiento. "El guardián entre el centeno" de J. D. Salinger es uno de los más notorios, asociado con varios asesinos, incluido Mark Chapman, quien disparó a John Lennon. Chapman no solo había leído el libro, sino que había dejado una nota en la que se declaraba inspirado por su contenido. Este vínculo ha llevado a una comprensión más profunda sobre cómo ciertos textos pueden resonar con individuos que ya están predispuestos a la violencia. Otro caso emblemático es el de Ted Kaczynski, el conocido Unabomber, quien encontró en "El agente secreto" de Joseph Conrad un fuerte impacto. Kaczynski no solo admiraba a Conrad, sino que su obsesión por el autor lo llevó a utilizar su estilo literario en sus escritos, lo que finalmente ayudó a su hermano a identificarlo ante el FBI. Este tipo de conexión literaria plantea preocupaciones sobre cómo la influencia de ciertos libros puede atravesar la línea entre la admiración y la emulación de comportamientos destructivos. Charles Manson es otro claro ejemplo de cómo la literatura puede ser utilizada como herramienta de manipulación y control. Su lectura de "Cómo ganar amigos e influir sobre las personas" le permitió cultivar una imagen de carisma y persuasión, lo que facilitó el reclutamiento y la manipulación de sus seguidores. Además, su interés en "Stranger in a Strange Land" de Robert Heinlein refleja cómo ciertos textos pueden inspirar ideologías extremas y sectarias. Los ejemplos no cesan ahí. Ted Bundy, un infame asesino en serie, mostró fascinación por la novela "Papillon", que narra la historia de un hombre que busca libertad a toda costa. Bundy se identificaba con la temática de la lucha por la libertad, lo que invita a reflexionar sobre cómo ciertos narrativos pueden resonar con personas que se encuentran en situaciones desesperadas o en busca de justificación para sus crímenes. El caso de Mangione, y su conexión con un libro que critica a las compañías de seguros, sugiere que la literatura puede actuar como catalizador para individuos en conflicto con la sociedad. En un mundo donde los problemas sociales y económicos pueden conducir a una alienación, es crucial examinar cómo la literatura puede influir en la psique humana, especialmente en aquellos que ya están en la cuerda floja de la normalidad. Este fenómeno plantea preguntas inquietantes sobre la responsabilidad tanto de los autores como de las editoriales en la difusión de ciertos mensajes. Mientras que muchos libros ofrecen perspectivas valiosas y críticas sobre sistemas existentes, también es necesario considerar cómo pueden ser malinterpretados o utilizados por individuos con intenciones peligrosas. A medida que la discusión sobre el caso de Mangione continúa, se hace evidente que la relación entre los libros y la criminalidad es un tema complejo que requiere un análisis más profundo. ¿Son los libros meras herramientas de expresión, o pueden convertirse en armas en manos equivocadas? Esta pregunta deja abierta una reflexión sobre el papel de la literatura en la configuración de nuestras acciones y creencias.

Ver todo

Lo último en El mundo