Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
En un desarrollo preocupante, el Instituto Filipino de Volcanología y Sismología (PHIVOLCS) reportó una serie de actividades sísmicas en el Volcán Kanlaon, situado en la isla de Negros. En un corto período de 24 horas, el volcán experimentó 14 terremotos volcánicos, lo que ha generado alarmas y ha llamado la atención tanto de las autoridades locales como de los residentes. Según el último boletín de PHIVOLCS, la situación en Kanlaon ha escalado, especialmente tras su reciente erupción explosiva el 9 de diciembre. La agencia ha confirmado que el volcán emitió la asombrosa cantidad de 3,620 toneladas de dióxido de azufre el sábado 14 de diciembre, y además observó una pluma moderada de gas volcánico de 50 metros de altura desplazándose hacia el oeste-suroeste. También se ha notado un continuo desgasificado, lo que indica actividad volcánica en curso. Como resultado de estos desarrollos, PHIVOLCS ha elevado el estado de alerta a Nivel 3, lo que significa un estado intensificado de inquietud magmática. A la luz de estas condiciones, la agencia ha instado a los residentes que viven dentro de un radio de seis kilómetros desde la cumbre del volcán a evacuar de inmediato. La recomendación surge en medio de temores sobre los posibles peligros que podrían surgir, incluyendo una erupción explosiva repentina, flujos de lava, caída de ceniza, corrientes de densidad piroclástica, desprendimientos de rocas y lahares en caso de fuertes lluvias. El presidente Ferdinand "Bongbong" Marcos Jr. ha tranquilizado al público sobre la respuesta proactiva del gobierno ante la situación. Ha instruido al Departamento de Presupuesto y Gestión a liberar fondos para desastres destinados a facilitar las evacuaciones necesarias y otras medidas de emergencia. El Departamento de Salud (DOH) también está en alerta máxima, monitoreando las condiciones de salud en la zona y preparándose para abordar cualquier posible enfermedad relacionada con la erupción que pueda surgir. Además de estas iniciativas gubernamentales, las Fuerzas Armadas de Filipinas (AFP), la Policía Nacional de Filipinas (PNP) y la Oficina de Gestión y Penología de Cárceles (BJMP) en la isla de Negros han elevado sus niveles de alerta. Su preparación subraya la seriedad de la situación y la necesidad de capacidades de respuesta inmediata. A medida que el Volcán Kanlaon continúa mostrando signos de inquietud, la comunidad permanece en vilo, atenta a nuevos desarrollos. La combinación de actividad sísmica, emisiones de gas y la respuesta del gobierno sirve como un recordatorio del poder y la imprevisibilidad de la naturaleza. Se insta a los residentes a mantenerse informados a través de canales oficiales y a priorizar su seguridad a medida que la situación se desarrolla.