Alexandra Dovgan cautivará a Lima con su talento en música clásica a sus 16 años

La llegada de Alexandra Dovgan a Lima representa un hito no solo para la joven pianista, sino también para el público peruano que tendrá la oportunidad de presenciar el talento de una de las artistas más prometedoras del panorama musical contemporáneo. Con solo 16 años, Dovgan ha logrado cautivar a audiencias de todo el mundo con su virtuosismo y su interpretación conmovedora, características que la han posicionado entre los grandes del piano clásico. Originaria de Moscú y con una carrera que despegó a una edad temprana, Dovgan ha demostrado que, aunque joven, su compromiso con la música es descomunal. Desde que comenzó a tocar el piano antes de cumplir cinco años, ha sido guiada por la influencia de su familia y su profesora en la Escuela Central Académica de Música del Conservatorio Estatal de Moscú, lo que ha alimentado su pasión y perfección técnica. Su reciente visita a Lima es una parte integral de su gira internacional, donde llevará su arte a nuevos escenarios, sumando aún más credibilidad a su creciente carrera. En una reciente entrevista, Dovgan compartió sus recuerdos más entrañables relacionados con la música y cómo su formación ha moldeado su enfoque sobre el piano. "Mis primeros recuerdos del piano están muy ligados a mi familia y a mi profesora", comentó. Este vínculo emocional con su entorno ha sido esencial en su desarrollo como artista, y su reconocimiento de los nervios que siente antes de una actuación revela una humildad que contrasta con su impresionante capacidad técnica. La afirmación de su mentor Grigori Sokolov, quien la describió no solo como una niña prodigio, sino como un prodigio en sí mismo, resuena en su enfoque meticuloso ante cada presentación. Dovgan se toma el tiempo necesario para preparar sus obras, asegurándose de que su interpretación sea lo más auténtica y profunda posible. Esto incluye la práctica exhaustiva y la reflexión sobre cada pieza, así como la escucha de grabaciones de otros artistas para inspirarse y ofrecer diferentes matices en su interpretación. El programa que presentará en Lima incluye obras de gigantes de la música clásica como Schumann, Beethoven, Bach, Rachmaninov y Scriabin, lo que promete una velada llena de emociones y destreza musical. La inclusión de estos compositores refleja su formación académica sólida y su deseo de rendir homenaje a esos grandes que han marcado la historia de la música clásica. Cada pieza será también una oportunidad para que el público peruano conecte con la profundidad emocional que Dovgan transmite a través de su música. A pesar de su dedicación al piano, Dovgan destaca la importancia de equilibrar su vida personal con su carrera. Actividades como el esquí y el ballet no solo le brindan momentos de esparcimiento, sino que también son esenciales para su bienestar y preparación artística. "Estas actividades me permiten recargar energías y relajarme para mejorar mi rendimiento", explica, subrayando que la vida de un músico no es solo trabajo y disciplina, sino también la búsqueda de momentos de alegría y desconexión. La etapa actual de Dovgan no es simplemente una serie de actuaciones, sino un viaje hacia la consolidación de su carrera. Sus múltiples premios y reconocimientos son un testimonio de su esfuerzo, aunque ella misma considera que son solo un reflejo de su dedicación y amor por la música. "Lo más importante es seguir desarrollándome, trabajar duro y disfrutar de la música que toco", enfatiza, dejando claro que su verdadero objetivo va más allá de los galardones. A medida que se acerca su presentación en Lima, la expectativa crece entre los amantes de la música clásica. La oportunidad de ver a una artista de su calibre en un escenario local es, sin duda, un regalo para la comunidad cultural peruana. La llegada de Dovgan promete no solo ser una experiencia inolvidable para sus asistentes, sino también un impulso para el interés por la música clásica entre las nuevas generaciones. Su visita marca un capítulo emocionante en la escena musical del Perú, donde la fusión entre el talento joven y las tradiciones clásicas puede abrir nuevas puertas y oportunidades para músicos locales. La presencia de Dovgan es un recordatorio de que el arte trasciende fronteras y de que el compromiso con la excelencia puede llevar a los artistas a lugares impensados. El legado de pianistas como Dovgan es, en última instancia, un llamado a la apreciación de la música como una forma de expresión universal que conecta a las personas, sin importar su origen. Con su inminente actuación, Alexandra Dovgan no solo tocará el piano; tocará los corazones de quienes tengan el privilegio de escucharla.