Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
El gobierno británico continúa con su proceso de desinversión en el banco NatWest, antes conocido como Royal Bank of Scotland, con el objetivo de desprenderse por completo de las acciones que mantiene en la entidad. Según la información más reciente, el Estado británico ha reducido su participación en el banco a menos del 20%, específicamente al 19,97%, lo que representa un valor de 6.390 millones de euros. Esta disminución de la participación estatal en NatWest es significativa, ya que no se registraba un porcentaje tan bajo desde 2008, cuando el banco pasó a ser de propiedad pública. Estos movimientos forman parte de la estrategia del gobierno de Londres para retirarse como accionista y permitir que el banco vuelva a un accionariado completamente privado. Una de las implicaciones prácticas de esta reducción en la participación estatal es que el Estado ya no se considera una parte vinculada, lo que conlleva una disminución de las cargas administrativas y una reducción en el poder público para nombrar directivos en el banco. De esta manera, se evidencia un proceso de desvinculación progresiva entre el gobierno y NatWest. El CEO de NatWest, Paul Thwaite, ha reiterado que la meta principal es lograr que el banco vuelva a manos privadas por completo, ya que consideran que esta medida beneficiará tanto a la entidad como a todos sus accionistas. Esta declaración refleja el compromiso de la dirección del banco por alcanzar la plena privatización de la institución financiera. En los últimos meses, la salida del Estado de NatWest se ha acelerado, coincidiendo con el cambio de gobierno en el Reino Unido. A finales de 2023, el gobierno británico aún mantenía un 37,98% de participación en el banco, lo que indica una reducción significativa en un corto período de tiempo. La estrategia de desinversión trazada por el Partido Conservador se ha visto alterada por la llegada al poder del Partido Laborista. A pesar de esto, tanto los conservadores como los laboristas han expresado su interés en continuar reduciendo la presencia estatal en NatWest, aunque las estrategias específicas de cada partido pueden variar. Es importante recordar que en 2008, el gobierno británico rescató al Royal Bank of Scotland con una inversión de 45.500 millones de libras para adquirir un 58% de propiedad. Este porcentaje aumentó posteriormente al 84,9%, antes de iniciar el proceso de desinversión. Actualmente, la capitalización bursátil de NatWest es de 26.900 millones de libras, mientras que la parte en manos públicas tiene un valor de 5.370 millones de libras. En resumen, la reducción de la participación estatal en NatWest marca un hito en el proceso de privatización del banco y refleja el compromiso del gobierno británico por abandonar su rol como accionista mayoritario. Este proceso continuará evolucionando en los próximos meses, con la expectativa de que NatWest vuelva a ser una entidad totalmente privada en un futuro cercano.