Fallece Sérgio Mendes, el legendario maestro de la bossa nova a los 83 años

Sérgio Mendes, el icónico músico brasileño que llevó la bossa nova a un público internacional, ha fallecido a la edad de 83 años en Los Ángeles, dejando un legado musical que perdurará en la memoria colectiva. Su deceso, ocurrido el jueves, fue atribuido a un caso de covid persistente, según informaron sus familiares. Mendes no solo fue un pianista excepcional, sino también un compositor y arreglista cuya influencia se sintió en el panorama musical durante más de seis décadas. Mendes alcanzó la fama en 1966 con su grupo Sérgio Mendes & Brasil '66, gracias a su interpretación del célebre tema "Mas que nada", escrito por el cantautor brasileño Jorge Ben. Este sencillo se convirtió en un fenómeno que catapultó a Mendes a la escena musical de Estados Unidos, donde su sonido sofisticado y rítmico deslumbró a audiencias que por entonces estaban dominadas por el rock y otros géneros emergentes. A través de su música, Mendes logró amplificar la esencia de la bossa nova, un género que se caracteriza por sus suaves acordes de guitarra y melodías seductoras. La carrera de Mendes está marcada por una impresionante producción de cerca de 35 álbumes, lo que demuestra su incansable dedicación a la música. A lo largo de su trayectoria, logró obtener tres premios Grammy y fue nominado al Oscar en 2012 por su contribución a la banda sonora de la película animada "Río". Esta mezcla de talento y versatilidad lo convirtió en uno de los exponentes más destacados de la música popular. El sonido de Sérgio Mendes era único. Su habilidad para combinar ritmos complejos con melodías accesibles hizo de su música un fenómeno que trascendió fronteras. La estudiosa de la música latina Leila Cobo, en un documental de HBO, describió a Mendes como un artista que tenía total confianza en su sonido, el cual se alejaba de las tendencias del rock 'n' roll que dominaban la época. "Era completamente diferente a todo", afirmó Cobo, destacando la audacia de Mendes al presentar una propuesta musical fresca y auténtica. Mendes inició su carrera en Estados Unidos tras un exitoso concierto en el Carnegie Hall en 1962, donde se presentó junto a innovadores de la bossa nova, incluido su mentor Antonio Carlos Jobim. Sin embargo, su regreso a Brasil fue breve debido al golpe militar de 1964, que lo llevó a huir del país tras experimentar una detención. A pesar de las dificultades, Mendes optó por quedarse en Estados Unidos, decidido a encontrar su lugar en la industria musical y alcanzar el éxito que tanto anhelaba. A lo largo de su vida, Mendes no solo dejó una huella imborrable en la música, sino que también inspiró a generaciones de músicos y aficionados al jazz y la música popular. Su estilo, que incorporaba elementos de la música brasileña con el jazz y el pop, abrió puertas a muchos artistas que lo siguieron, convirtiéndose en un pionero en la fusión de géneros. Su legado perdura no solo en sus grabaciones y presentaciones en vivo, sino también en la influencia que ejerció en otros artistas. Mendes fue un puente cultural que acercó la música brasileña al mundo, y su trabajo sigue siendo una referencia en la música contemporánea. La capacidad de Mendes para conectar con el público, junto con su talento excepcional, han asegurado que su música continúe resonando en los corazones de muchos. Le sobreviven su esposa, Gracinha Leporace, y sus hijos Tiago y Gustavo, así como tres hijos de su primer matrimonio y siete nietos. Su familia, que lo apoyó a lo largo de su carrera, ahora lleva el peso de su pérdida mientras el mundo musical se une para rendir homenaje a uno de los grandes maestros de la bossa nova. La producción musical de Mendes y su contribución al mundo del entretenimiento serán recordadas con cariño y admiración. Se espera que se realicen homenajes en su honor, donde músicos y aficionados podrán celebrar su vida y legado. La partida de Sérgio Mendes es, sin duda, una gran pérdida para el mundo de la música, pero su espíritu y su sonido vivirán eternamente en cada acorde que tocó y en cada corazón que tocó con su arte.