Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
A medida que el calendario se acerca a otro emocionante fin de semana de baloncesto femenino, la atención se centra en un enfrentamiento muy esperado entre los Notre Dame Fighting Irish y los North Carolina Tar Heels. Programado para este domingo, el choque promete ser un encuentro apasionante entre dos de los equipos mejor clasificados de la Conferencia de la Costa Atlántica (ACC). Actualmente, Notre Dame se presenta como favorito de visita, continuando su impresionante forma que los ha mantenido invictos desde el 30 de noviembre. Bajo la dirección de la entrenadora principal Niele Ivey, los Fighting Irish han sido una fuerza a tener en cuenta, con tres notables victorias en el top cinco, incluyendo una destacada victoria por 11 puntos sobre el No. 2 UConn y un sorpresivo triunfo por 13 puntos contra el USC, que ocupa el tercer lugar. La columna vertebral de este poderoso ataque es Hannah Hidalgo, quien ha sido simplemente sensacional. Promediando 26 puntos por partido, está lanzando un impresionante 50% desde el campo, 44% desde más allá del arco y 84% desde la línea de tiros libres, todo mientras lidera la NCAA con 4.1 robos por partido. Su electrizante juego la ha convertido en una de las jugadoras más emocionantes para ver esta temporada. Sumando a esta potencia ofensiva, Olivia Miles acaba de ser nombrada Jugadora de la Semana de la ACC. La destacada base lidera la conferencia en asistencias y en tiros de tres puntos, convirtiéndola en un componente esencial de la estrategia de Notre Dame. Con un poder adicional de Sonia Citron, que tiene un porcentaje de tiro del 39% desde tres, los Irish están equipados para convertir los partidos en exhibiciones de anotación cuando sus tiros están cayendo. Sin embargo, en su camino se encuentra un formidable equipo de North Carolina que se enorgullece de su tenacidad defensiva. Los Tar Heels, bajo la dirección de la entrenadora Courtney Banghart, se han hecho conocidos por su sólida defensa, actualmente clasificada como la décima mejor del país en defensa de anotaciones. Los oponentes han encontrado difícil lanzar más del 35% contra ellos, lo que hace imperativo que Notre Dame encuentre formas de crear tiros abiertos. Indya Nivar, quien promedia más de dos robos por partido, y Alyssa Ustby, una confiable titular de cinco años que contribuye en múltiples categorías estadísticas, son figuras clave para mantener esa presión defensiva. A pesar de sus fortalezas defensivas, North Carolina ha tenido resultados mixtos contra oponentes clasificados, asegurando una victoria contra Kentucky pero quedándose corta contra UConn. Un área crítica de enfoque para los Tar Heels será, sin duda, su tiro libre, que ha sido una debilidad evidente. Con un promedio de equipo de solo 65.1% desde la línea, han dejado un número significativo de puntos en la mesa esta temporada, un factor que podría influir en el resultado de un juego tan reñido. Notablemente, ambos equipos han enfrentado desafíos relacionados con la salud de los jugadores. Notre Dame aún está navegando por el impacto de las lesiones sufridas en temporadas anteriores, siendo más notable la ausencia de Miles, quien ha sido una jugadora crucial para ellos. Los Irish esperan mantener un plantel saludable a medida que avanzan hacia la locura de marzo, donde las lesiones a menudo pueden descarrilar incluso las temporadas más prometedoras. Mientras tanto, los Tar Heels necesitarán aprovechar su ventaja de local y asegurarse de convertir los tiros libres en momentos cruciales. Históricamente, la rivalidad entre estos dos programas ha producido momentos memorables, incluyendo un partido de torneo de la NCAA muy disputado en 2007 y una actuación dominante de Notre Dame en el Torneo de la ACC de 2019. A medida que ambos equipos se preparan para su próximo capítulo en esta histórica rivalidad, los aficionados pueden esperar intensidad, habilidad y una exhibición de algunos de los mejores talentos que el baloncesto universitario femenino tiene para ofrecer. En lo que promete ser un encuentro emocionante, el choque de estilos, con la ofensiva de alto octanaje de Notre Dame contra la firme defensa de North Carolina, sin duda mantendrá a los aficionados al borde de sus asientos. A medida que se acerque el inicio del partido, todas las miradas estarán puestas en la cancha, esperando ansiosamente lo que podría ser otro capítulo memorable en esta competitiva rivalidad.