Hospital Civil de Guadalajara destaca en atención y prevención del VIH en la región

El Hospital Civil de Guadalajara Fray Antonio Alcalde ha estado al frente de la atención a pacientes con VIH en la región, brindando servicios a más de 4,000 personas, un número que incluye a mujeres embarazadas, personas trans y jóvenes de 16 a 24 años. La jefa de la Unidad de VIH, Luz Alicia González Hernández, enfatiza la importancia de la atención especializada, destacando que los pacientes reciben un tratamiento adaptado a sus necesidades individuales. Esto se traduce en una sola pastilla diaria que ha demostrado mejorar significativamente la calidad de vida de los infectados. La atención a personas vulnerables, como las mujeres embarazadas y las personas transgénero, es particularmente fundamental. Según el investigador Carlo Valentino García y Nuño, aproximadamente 15 mujeres embarazadas y más de 100 personas trans están bajo tratamiento en el hospital. La posibilidad de que el VIH se transmita de madre a hijo durante el embarazo es un desafío considerable, pero el diagnóstico temprano y el tratamiento adecuado pueden reducir sustancialmente este riesgo. En México, se estima que cada 30 minutos se diagnostica a una nueva persona con VIH. Esta alarmante tasa subraya la urgencia de una mayor concienciación y educación sobre la enfermedad, así como la necesidad de realizar pruebas de detección, especialmente tras actividades consideradas de riesgo, como relaciones sexuales sin protección o el uso compartido de jeringas. Luz Alicia González también resalta que todas las mujeres embarazadas deben solicitar la prueba de VIH a su médico, asegurando así un mejor seguimiento y prevención de la transmisión al feto. El acceso a la Profilaxis Pre Exposición (PrEP) es otro elemento clave en la estrategia de prevención. Esta opción, disponible de manera gratuita en el Hospital Civil, permite a las personas con alta probabilidad de contraer el virus protegerse mediante la ingesta diaria de una pastilla que reduce significativamente el riesgo de infección. La educación sobre este recurso, así como su disponibilidad, son cruciales para la prevención del VIH en poblaciones en riesgo. La transmisión del VIH puede ocurrir en varias etapas del embarazo: gestacional, intraparto y post-parto. La educación sobre estos mecanismos de transmisión es esencial para reducir el riesgo de que el virus sea transferido al bebé. Es recomendable que las mujeres gestantes, independientemente de su historial sexual, se realicen pruebas de VIH, lo que aumenta las posibilidades de que su hijo nazca libre del virus. A medida que la ciencia avanza, los tratamientos antirretrovirales han evolucionado, permitiendo que las personas diagnosticadas vivan vidas largas y saludables. Con un diagnóstico oportuno, la esperanza de vida puede extenderse a cerca de 76 años, lo que refleja un cambio positivo en la percepción y tratamiento del VIH en la sociedad. Sin embargo, el estigma y los mitos que rodean a la enfermedad aún persisten, dificultando la búsqueda de atención médica. Los esfuerzos realizados por el Hospital Civil de Guadalajara y otros centros de salud en el país destacan la necesidad de una atención integral y continua para los pacientes con VIH. Esto no solo incluye el tratamiento médico, sino también el apoyo psicológico y emocional, que es fundamental para ayudar a los pacientes a afrontar el diagnóstico y los desafíos que conlleva la vida con VIH. El compromiso del personal de salud en la lucha contra el VIH es inquebrantable. La capacitación constante y la sensibilización sobre la enfermedad son prioridades para quienes trabajan en el ámbito de la salud pública. A medida que se rompen los tabúes y se derriban los mitos, hay una creciente esperanza de que más personas busquen asistencia y, en consecuencia, se reduzcan los nuevos casos de infección. La colaboración entre instituciones de salud, organizaciones no gubernamentales y la comunidad en general será vital para continuar este avance en la lucha contra el VIH. Cada individuo tiene un papel que desempeñar en la promoción de la educación y la prevención, contribuyendo a un futuro donde la infección por VIH no sea un estigma, sino una condición manejable que permite a las personas vivir plenamente.