Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
A medida que el impacto del cambio climático continúa escalando, los desastres naturales se están convirtiendo cada vez más en parte de nuestra realidad. En Florida, las apuestas son especialmente altas cuando se trata del bienestar de los animales durante estos eventos catastróficos. Los recientes huracanes han puesto de manifiesto la urgente necesidad de un sistema robusto de veterinarios de emergencia que responda de manera rápida y efectiva cuando ocurre un desastre. Durante la reciente temporada de huracanes, nuestro equipo en el Servicio de Tratamiento Veterinario de Emergencia de la Universidad de Florida (UF VETS) se vio obligado a entrar en acción, brindando apoyo a organizaciones locales como la Sociedad Humana para rescatar a los animales desplazados por las poderosas tormentas. Nuestras experiencias respondiendo al huracán Helene y posteriormente al huracán Milton destacaron la naturaleza caótica de las operaciones de rescate animal en ausencia de un sistema nacional de respuesta coordinado. Los animales sufren innecesariamente debido a esfuerzos desorganizados, subrayando la necesidad inmediata de un apoyo estructurado. UF VETS es uno de solo tres equipos de respuesta veterinaria de emergencia en la nación. Establecido tras la destructiva temporada de huracanes de 2004, nuestro programa abarca dos ramas esenciales: respuesta médica para animales afectados por desastres y operaciones de rescate técnico para situaciones que involucran rescates complejos, como remolques de ganado volcado. Nuestro equipo colabora estrechamente con organizaciones veterinarias locales y estatales, rescates de animales y agencias de law enforcement para proporcionar asistencia crucial durante las crisis. Sin embargo, sin un marco nacional, nuestros esfuerzos a menudo se ven obstaculizados. Aquí es donde el Congreso puede hacer una diferencia significativa. A medida que los legisladores se reúnen nuevamente, tienen la oportunidad de incluir financiamiento vital en el proyecto de ley de asignaciones para el Departamento de Seguridad Nacional del FY 2025 para establecer una red coordinada de equipos veterinarios de emergencia en todo el país. Tal financiamiento transformaría la forma en que se maneja el cuidado de los animales durante los desastres nacionales, asegurando que existan mecanismos de respuesta oportunos y efectivos. Al colaborar con instituciones como la Universidad Texas A&M y la Universidad de California, Davis, podríamos crear una red nacional capaz de trabajar junto a agencias federales, incluida la Agencia Federal de Manejo de Emergencias y el Departamento de Agricultura. Este enfoque coordinado no solo mejoraría la respuesta inmediata a los desastres, sino que también expandiría las oportunidades de capacitación para veterinarios y primeros respondedores a nivel nacional. Nuestras iniciativas de capacitación son esenciales, ya que los primeros respondedores son aliados clave en estos esfuerzos. Recientemente, iniciamos programas de capacitación especializada en respuesta a la nueva legislación de Florida destinada a apoyar a los oficiales K-9 heridos. Estos programas preparan a los manejadores y paramédicos para brindar atención crítica en el lugar, potencialmente salvando las vidas de estos animales de servicio indispensables. En julio, nuestra participación en un ejercicio de simulación a gran escala en Ocala, Florida, mostró los esfuerzos colaborativos de socios locales, estatales y nacionales para mejorar las estrategias de respuesta animal durante emergencias. Además, nuestro compromiso se extiende a educar a futuros veterinarios de respuesta a emergencias. Los estudiantes en UF obtienen una experiencia práctica invaluable a través de un riguroso entrenamiento en rescate técnico, equipándolos con habilidades esenciales que pueden aplicarse en situaciones del mundo real. En conclusión, el Congreso tiene un papel fundamental que desempeñar en la mejora del bienestar animal durante los desastres. Al invertir en preparación para emergencias, capacitación y educación veterinaria especializada, los legisladores pueden asegurar que el ganado y las mascotas de nuestra nación reciban la protección que merecen tras desastres naturales. El momento de actuar es ahora: las vidas de nuestros animales dependen de ello.