Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
Disney ha tomado la decisión de retirar un arco argumental transgénero de su nueva serie animada 'Win or Lose', que tiene programado su estreno para febrero de 2024. Este cambio se produce en un contexto donde la empresa, bajo la dirección de Robert Iger, está revisando sus políticas y contenidos en respuesta a críticas sobre la politización de sus producciones. La serie, que sigue a un equipo mixto de softball durante la semana previa a un campeonato, presentará episodios narrados desde la perspectiva de diferentes personajes. Aunque el personaje en cuestión sigue formando parte de la historia, se han eliminado algunas líneas que abordaban su identidad de género. La decisión de modificar el contenido de 'Win or Lose' se tomó durante el verano, y Disney ha señalado que esta acción busca respetar las preferencias de muchos padres, quienes desean tratar ciertos temas con sus hijos en sus propios términos y en el momento que consideren adecuado. Este enfoque refleja una estrategia más amplia de la compañía para suavizar sus mensajes en un entorno cada vez más polarizado. A lo largo de los años, Disney ha enfrentado reacciones encontradas respecto a la inclusión de personajes y tramas LGBTQ en sus producciones dirigidas al público familiar. En 2022, por ejemplo, el estreno de 'Lightyear' y 'Un mundo extraño' fue objeto de críticas y controversias, especialmente entre grupos conservadores que se oponen a la representación de temas LGBTQ en el entretenimiento infantil. La presión sobre la compañía se intensificó cuando el entonces CEO, Bob Chapek, fue criticado por no condenar la legislación anti-LGBTQ en Florida. Su eventual respuesta a estas acusaciones fue considerada por un sindicato de empleados como un "paso en falso trascendental". Esta tensión entre la dirección de la compañía y las expectativas de sus empleados y clientes ha llevado a Disney a repensar su enfoque hacia la representación y los temas sociales. Robert Iger, en su retorno a la dirección de Disney, ha subrayado que algunos de los contenidos de la empresa se habían vuelto excesivamente políticos, lo que ha generado un debate interno sobre la dirección artística y comercial de la compañía. La reestructuración del contenido puede ser vista como un intento por parte de Disney de navegar entre las demandas de la audiencia actual y las expectativas de sus accionistas. La serie 'Win or Lose', creada por un equipo de escritores y productores, incluido Will Forte como la voz del entrenador, ha sido diseñada para abordar temas universales como la amistad, la diversidad y la competencia. Sin embargo, la eliminación de un arco argumental que abordaba la identidad de género pone de relieve las dificultades que enfrenta la compañía para equilibrar la inclusión con su necesidad de evitar controversias. Este movimiento también resalta cómo la industria del entretenimiento, especialmente en el ámbito de la animación dirigida a un público joven, se encuentra en un dilema sobre la representación de diversas identidades en un contexto donde las sensibilidades de los padres y las críticas de los grupos conservadores son cada vez más predominantes. La decisión de Disney podría interpretarse como un paso hacia la moderación en respuesta a estas presiones. A medida que se acerca la fecha de estreno de 'Win or Lose', será interesante observar cómo la audiencia recibe la serie y si la decisión de alterar el contenido impactará su popularidad. Esta situación también podría sentar un precedente para futuros proyectos dentro de la compañía y en toda la industria de entretenimiento, donde cada vez más se exige un equilibrio entre la representación y la recepción del público. En un mundo que se encuentra en constante evolución, la capacidad de las empresas para adaptarse a las expectativas cambiantes de sus consumidores será crucial. Disney, como líder en la industria del entretenimiento, se enfrenta a un momento decisivo que podría definir su futuro en términos de contenido inclusivo y su legado como narrador de historias.