Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
Los esfuerzos de rescate en Vanuatu se están intensificando a medida que los equipos trabajan incansablemente para localizar sobrevivientes tras un devastador terremoto de magnitud 7.3 que golpeó a la nación insular el martes. El sismo, que tuvo lugar cerca de la capital, Port Vila, ha cobrado al menos 14 vidas y ha dejado aproximadamente 200 heridos más, según el jefe regional de la Cruz Roja, quien se refirió a cifras gubernamentales en su evaluación. A medida que se asienta el polvo de los temblores, los primeros respondedores, incluidos policías, fuerzas paramilitares y paramédicos, se han movilizado para navegar entre los escombros de las estructuras colapsadas en el distrito comercial de la ciudad. Entre los más afectados se encuentra un complejo comercial, donde los equipos de rescate están desplegando maquinaria pesada con la esperanza de encontrar a sobrevivientes atrapados bajo los escombros. En las secuelas del terremoto, la escena en Port Vila es de caos e incertidumbre. Vidrios rotos y metal retorcido cubren las calles, mientras las familias buscan frenéticamente a sus seres queridos. Muchos residentes se enfrentan a la pérdida de sus hogares y medios de vida, ya que el terremoto ocurrió durante las horas más activas del día, sorprendiendo a muchos. Las autoridades locales están coordinando con organizaciones humanitarias para evaluar la magnitud total de los daños y proporcionar asistencia inmediata a los afectados. Se están estableciendo refugios para albergar a las familias desplazadas, mientras que los servicios de emergencia están en alerta máxima para responder a posibles réplicas que puedan agravar la ya desafiante situación. El terremoto ha atraído la atención internacional, con ofertas de apoyo y ayuda que llegan de países vecinos y grupos humanitarios de todo el mundo. A medida que continúan las operaciones de rescate, el enfoque sigue siendo salvar vidas y satisfacer las necesidades básicas de quienes han sido afectados por este desastre natural. Los sobrevivientes están compartiendo relatos desgarradores de sus experiencias, recordando el momento en que el suelo tembló violentamente bajo sus pies y el pánico que siguió. Con el número de muertos probablemente en aumento a medida que continúan las búsquedas, Vanuatu enfrenta un largo camino hacia la recuperación, subrayando la urgente necesidad de solidaridad y apoyo de la comunidad global tras esta tragedia.