Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
En un esfuerzo concertado por abordar las necesidades de las familias afectadas por la reciente erupción del Monte Kanlaon, el presidente Ferdinand Marcos ha asegurado al público el inquebrantable apoyo del gobierno a aquellos desplazados por el desastre natural. A medida que la situación se desarrolla en la Región de la Isla Negros, el presidente Marcos enfatizó la disposición de la administración para ayudar a los evacuados, particularmente a aquellos ubicados fuera de la zona de peligro de seis kilómetros. En un movimiento proactivo, el secretario Rex Gatchalian del Departamento de Bienestar Social y Desarrollo (DSWD) fue enviado a la región afectada a primera hora del lunes. Su presencia tiene como objetivo supervisar las operaciones de socorro en curso que ya han comenzado, reflejando la dedicación del gobierno para proporcionar ayuda inmediata a quienes la necesitan. “Estamos listos para apoyar a las familias que han sido evacuadas”, declaró el presidente Marcos durante su anuncio, destacando el compromiso del Departamento de Presupuesto y Gestión, que ha prometido los recursos necesarios para facilitar estos esfuerzos de ayuda. Las medidas de socorro que se están implementando actualmente incluyen la distribución de paquetes de comida y suministros esenciales a varios centros de evacuación. El gobierno está asegurando que se satisfagan las necesidades básicas mientras los residentes enfrentan los desafíos planteados por la actividad volcánica. Además de la respuesta humanitaria, la situación está siendo monitoreada de cerca por el Departamento de Medio Ambiente y Recursos Naturales (DENR) y el Departamento de Ciencia y Tecnología (DOST), que están evaluando activamente la calidad del aire alrededor del volcán. Se centran particularmente en evaluar los niveles de gases tóxicos resultantes de la erupción para determinar si se justifican más evacuaciones. El lunes por la tarde, el Instituto Filipino de Vulcanología y Sismología (Phivolcs) elevó el Volcán Kanlaon al Nivel de Alerta 3, indicando un importante desasosiego magmático tras una erupción explosiva desde su cumbre. La erupción produjo una sustancial columna de ceniza que ascendió aproximadamente 3,000 metros en la atmósfera y se desplazó hacia el oeste-suroeste. Se observaron corrientes de densidad piroclástica descendiendo por las laderas sureste del volcán, representando una amenaza potencial para las comunidades cercanas. En respuesta a las condiciones peligrosas resultantes de la erupción, la Cruz Roja Filipina ha aconsejado a los residentes afectados que usen mascarillas para mitigar los problemas respiratorios causados por la ceniza volcánica. Esta precaución es crítica, ya que la caída de ceniza puede provocar diversas complicaciones de salud, particularmente para aquellos con condiciones respiratorias preexistentes. A medida que el gobierno moviliza recursos y personal para responder a este desastre natural, se está poniendo a prueba la resiliencia de las comunidades afectadas. Sin embargo, con el apoyo de agencias locales y nacionales, hay esperanza de que las familias desplazadas por la erupción volcánica reciban la asistencia necesaria para recuperarse y reconstruir sus vidas tras esta calamidad.