Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
En el marco de la 115ª edición de la Media Maratón de Lima, que tendrá lugar este domingo 25 de agosto, se alza un mensaje poderoso sobre la inclusión y la empatía a través del deporte. Achilles Perú, una organización dedicada a apoyar a atletas con discapacidad visual y física, estará presente con un equipo de diez atletas que, junto a guías voluntarios, demostrarán que el verdadero sentido de correr va más allá de alcanzar una meta: se trata de unir corazones y derribar barreras sociales. Claudia Gamarra, directora de Achilles Perú, subraya la importancia de su labor en la promoción del deporte como un vehículo para la inclusión. "Cuando nuestros chicos vienen aquí, sienten que tienen una familia con quien disfrutar y compartir conocimientos culturales", afirma. La dinámica de esta comunidad trasciende la mera competencia; se trata de crear un espacio seguro y acogedor donde cada miembro puede expresarse libremente y forjar conexiones significativas. La organización, que cuenta con un promedio de 20 personas activas entre atletas, guías y voluntarios, ha estado operando durante seis años bajo la filosofía de Achilles Internacional, que aboga por un enfoque inclusivo en países de todo el mundo. Claudia destaca que la inclusión es un valor fundamental que debe ser promovido en todos los ámbitos de la vida. "He tenido la mala suerte de conocer personas que no son empáticas; la falta de accesibilidad y comprensión es un reto constante para muchos", dice, evocando las múltiples dificultades que enfrentan las personas con discapacidad en la vida cotidiana. La participación de Achilles Perú en la Media Maratón de Lima no es solo un evento deportivo. Es una plataforma para visibilizar la necesidad de empatía hacia quienes viven con algún tipo de discapacidad. Claudia revela que, tras la maratón, el próximo objetivo de la organización es participar en la Maratón de Viña del Mar en Chile, lo que evidencia su deseo de expandir su mensaje y su comunidad. Los testimonios de los guías y atletas de Achilles Perú ofrecen una perspectiva única sobre lo que significa ser parte de esta maravillosa comunidad. Un guía describe la conexión que se establece al correr junto a un atleta con discapacidad visual. "Mis manos, unidas a la cinta, se mueven creando un recorrido que mi amigo hace suyo. Es una danza de confianza y comunicación, donde cada movimiento cuenta", comparte. Para él, la experiencia va más allá del simple acto de correr; es una forma de vida que exige concentración y compromiso. Otro guía resalta la belleza del trabajo en equipo: "Lo más difícil es mantener la concentración y la estrategia, pero lo más gratificante es saber que con mis ojos y mi voz, podemos correr juntos. Nos regulamos mutuamente, confiamos el uno en el otro, y eso nos convierte en uno solo". La sinergia creada entre guía y atleta es un ejemplo del poder que tiene el deporte para unir a las personas, independientemente de sus capacidades. Mientras tanto, los atletas también expresan su gratitud por la oportunidad de participar y por el apoyo que reciben. "Soy parte de esta organización porque quiero demostrar que no hay límites para lo que podemos lograr juntos", dice uno de ellos. Esta declaración resuena con el carácter inclusivo que Achilles Perú busca promover en cada competición. El compromiso de Achilles Perú no solo se limita a eventos deportivos; también se extiende a la educación y la sensibilización sobre la inclusión. Claudia y su equipo están decididos a cambiar la narrativa en torno a la discapacidad, abogando por un mundo donde cada persona tenga las mismas oportunidades, sin importar sus limitaciones físicas o sensoriales. Los esfuerzos de Achilles Perú son un recordatorio inspirador de que la inclusión es una responsabilidad colectiva. Mientras los atletas se preparan para la Media Maratón de Lima, el mensaje es claro: cada paso que den es un paso hacia la igualdad y una invitación a la sociedad para que se una en la lucha por un mundo más empático. Este domingo, más que una carrera, se correrá por la esperanza, por la inclusión y por un futuro donde todos puedan cruzar la meta juntos.