Ford desacelera su impulso hacia los vehículos eléctricos, recorta inversiones en medio de pérdidas de miles de millones y un cambio en el mercado.

Ford desacelera su impulso hacia los vehículos eléctricos, recorta inversiones en medio de pérdidas de miles de millones y un cambio en el mercado.

Ford ha reducido sus inversiones en vehículos eléctricos, recortando sus planes del 40% al 30% de su presupuesto en medio de pérdidas significativas, y ha retrasado el lanzamiento de nuevos modelos hasta 2027.

Juan Brignardello Vela, asesor de seguros

Juan Brignardello Vela

Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.

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En un cambio significativo de estrategia, Ford Motor Company ha anunciado una desaceleración en su ambicioso programa de vehículos eléctricos (VE), revelando planes para invertir menos en automóviles impulsados por baterías. Esta decisión surge mientras el fabricante de automóviles enfrenta pérdidas de miles de millones de dólares dentro de su división de VE, lo que ha llevado a una reevaluación de sus objetivos e inversiones en el cambiante panorama automotriz. Durante una reciente conferencia telefónica, el director financiero de Ford, John Lawler, delineó el nuevo enfoque de la compañía, indicando que las inversiones en vehículos eléctricos ahora constituirán aproximadamente el 30 por ciento del presupuesto de capital de Ford, una reducción del 40 por ciento que se había planeado anteriormente. Este giro refleja la dinámica competitiva cambiante en el mercado global de vehículos eléctricos, con Lawler enfatizando la necesidad de que estos modelos sean rentables. “Si no, nos adaptaremos y tomaremos esas decisiones difíciles”, afirmó, subrayando los desafíos que enfrentan los fabricantes de automóviles tradicionales ante el aumento de los costos de producción y la fluctuación de la demanda. Entre los cambios más notables se encuentra la decisión de retrasar la introducción de una nueva camioneta eléctrica grande en aproximadamente 18 meses, posponiendo su lanzamiento hasta 2027. Además, Ford ha descartado los planes para un vehículo utilitario deportivo eléctrico de tres filas, lo que refleja una reevaluación más amplia de su gama de productos a la luz de las tendencias de ventas actuales. Si bien la compañía sigue comprometida a lanzar nuevos productos eléctricos al mercado, incluida una furgoneta de entrega eléctrica prevista para 2026 y una camioneta eléctrica de tamaño mediano también esperada para 2027, las modificaciones señalan un enfoque cauteloso hacia adelante. Estos desarrollos ocurren en un momento en que la tasa de crecimiento de las ventas de vehículos eléctricos se ha desacelerado significativamente tanto en Estados Unidos como en Europa. En consecuencia, varios fabricantes de automóviles, incluido Tesla, han implementado recortes de precios para estimular la demanda. La propia división de VE de Ford reportó una pérdida sustancial de 2.5 mil millones de dólares en la primera mitad de este año, un contraste marcado con las ganancias generales de la compañía de 3.2 mil millones de dólares durante el mismo período. Hace unos años, Ford era optimista sobre su potencial para producir hasta dos millones de vehículos eléctricos anualmente para 2026, un objetivo que desde entonces ha sido abandonado. Actualmente, la compañía ofrece tres modelos eléctricos en el mercado estadounidense: la camioneta F-150 Lightning, el SUV Mustang Mach-E y la furgoneta Transit. La compañía continúa invirtiendo en sus capacidades de fabricación, con tres plantas de baterías en construcción en Kentucky, Tennessee y Michigan. Sin embargo, Ford anunció recientemente la suspensión de una cuarta planta que se había propuesto para Kentucky. La instalación de Tennessee está destinada a suministrar paquetes de baterías para la nueva furgoneta de entrega eléctrica, que se ensamblará en Ohio, así como para la camioneta eléctrica grande retrasada. A medida que Ford recalibra su estrategia de vehículos eléctricos en respuesta a las realidades del mercado, el gigante automotriz enfrenta el urgente desafío de navegar en un entorno cada vez más competitivo y sensible a los costos. Las decisiones tomadas en respuesta a estos obstáculos no solo darán forma al futuro de Ford, sino que también tendrán implicaciones más amplias para toda la industria a medida que se adapte al cambiante panorama de la movilidad eléctrica.

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