Juan Brignardello Vela
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A medida que se desarrolla el AIG Women's Open en el histórico St Andrews, todas las miradas están puestas en Charley Hull, de Gran Bretaña, quien se erige como un faro de esperanza para los entusiastas del golf europeo. Después de experimentar una montaña rusa de emociones en los recientes Juegos Olímpicos, donde tuvo un desafiante primer round de 81, Hull ha demostrado una notable resiliencia al recuperarse con actuaciones impresionantes que reavivan sus aspiraciones por un título importante. La jugadora de 28 años de Kettering demostró su potencial al finalizar las últimas tres rondas del torneo olímpico con un admirable ocho bajo par. Esta actuación destacó no solo su habilidad, sino también la oportunidad perdida de una medalla, si su ronda inicial hubiera estado más en línea con sus capacidades. La confianza de Hull continuó creciendo cuando recientemente compitió en el Scottish Open en Dundonald, donde sus resultados disiparon cualquier duda persistente sobre su capacidad para competir en campos de links. A pesar de los desafíos que conlleva el terreno único de St Andrews, el reciente quinto puesto de Hull en el Scottish Open le ha proporcionado valiosas perspectivas sobre cómo jugar en tales campos. Al caminar por el icónico hoyo 18 durante la práctica, Hull se mostró visiblemente conmovida por la significancia del momento, expresando sus emociones al sentir "escalofríos". La gravedad de competir en la "casa del golf" no le es ajena, y está ansiosa por convertir sus sueños de una primera victoria importante en realidad. El año pasado, estuvo muy cerca de alcanzar este objetivo, terminando como subcampeona frente a Lilia Vu en Walton Heath, y la experiencia solo ha intensificado su deseo de triunfar esta vez. Navegando por las complejidades del Old Course, Hull planea apoyarse en su caddie, Adam Woodward, para recibir orientación crítica. El campo es conocido por sus vistas engañosamente abiertas, que pueden desorientar incluso a los jugadores más experimentados. Para prepararse para los notorios vientos escoceses, ha ajustado su técnica, enfocándose en lograr trayectorias de bola más bajas que han demostrado ser exitosas en sus recientes salidas. Reflexionando sobre su trayectoria, Hull reconoce el crecimiento y la madurez que ha adquirido en su juego a lo largo de los años. "Siempre he dicho que a medida que maduro con mi juego de golf, lo entenderé más y jugaré mejor", señaló. Con su mentalidad decidida y sus recientes experiencias positivas, Charley Hull está lista para tener un impacto significativo en el Women's Open de este año, inspirando a una nueva generación de golfistas mientras representa el talento europeo en un gran escenario.