Juan Brignardello Vela
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El notable viaje olímpico de Adam Peaty dio un giro inesperado el lunes, cuando el equipo británico confirmó que el nadador ha dado positivo por Covid-19, justo un día después de haber ganado una medalla de plata en los 100 metros braza masculinos en los Juegos Olímpicos de París 2024. Peaty, de 29 años, estuvo a punto de asegurar su tercer título olímpico consecutivo en esta prueba, finalizando a solo 0.02 segundos del italiano Nicolo Martinenghi. La federación reveló que Peaty comenzó a sentirse mal antes de la sesión de la tarde de la final y que su condición se deterioró en las horas posteriores a la carrera. A la luz de sus síntomas, se sometió a una prueba de Covid-19 en la mañana del lunes, que devolvió resultados positivos. El equipo británico ha informado que Peaty ahora está siguiendo los protocolos de salud habituales para salvaguardar el bienestar de la delegación en medio de la pandemia en curso. Un portavoz del equipo británico declaró: “Adam Peaty comenzó a sentirse mal el domingo, antes de su final de 100 metros braza masculino. En las horas posteriores a la final, sus síntomas empeoraron y se le realizó una prueba de Covid a primera hora del lunes. En ese momento, dio positivo.” Como medida de precaución, el equipo está monitoreando de cerca la situación para garantizar la salud de todos los atletas y miembros del personal. A pesar del contratiempo, Peaty sigue siendo optimista sobre su posible participación en los próximos eventos de relevos programados más adelante en el programa de natación. El nadador no expresó decepción por perderse la medalla de oro y compartió su filosofía sobre la competencia. “No es triste en absoluto. Cualquiera que haya practicado un deporte, si estás dispuesto a arriesgarte cada vez, creo que no existe tal cosa como una derrota”, dijo después de la final. Reflexionando sobre su actuación, señaló: “Estoy tan feliz de que el hombre correcto ganara. Toqué la pared y realmente creí que lo había logrado, pero no estaba destinado a ser.” Peaty, quien ahora ha asegurado seis medallas olímpicas, enfatizó que su identidad no se define únicamente por las medallas que gana. “Esta es mi sexta medalla olímpica y el chico de 14 años que comenzó esta cruzada con Mel (Marshall, su entrenadora), eso no se puede superar. Este deporte me ha roto, pero también me ha dado vida, me ha dado todo lo que soy”, agregó. Mientras Peaty navega por este desafío sin precedentes, la comunidad de natación y los aficionados estarán observando de cerca, esperando su pronta recuperación y regreso a la piscina. La resiliencia y determinación que ha demostrado a lo largo de su carrera continúan inspirando a muchos, independientemente de las circunstancias que ahora enfrenta.