Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
Breaking, un estilo de baile que se originó en las calles de la ciudad de Nueva York en la década de 1970, se ha convertido en un fenómeno global que ha capturado los corazones de millones de personas en todo el mundo. Y ahora, con llamados para que el breaking sea incluido en los Juegos Olímpicos de París ganando impulso, defensores como Leigh Evelyn, conocido popularmente como Swifty en la comunidad de b-boys y b-girls, están presentando un convincente argumento para su reconocimiento en el escenario deportivo más grande del mundo. Describiendo el breaking como una mezcla de arte y deporte, Swifty destaca los elementos clave que definen esta forma de baile dinámica. Desde los intrincados top rocks que sirven como movimientos introductorios de los competidores hasta el footwork, los power moves y los freezes que no solo muestran habilidad técnica sino también creatividad y estilo, el breaking es una disciplina multifacética que exige una combinación de fuerza, velocidad, ritmo y agilidad. Para Swifty, quien ha dedicado más de dos décadas perfeccionando su arte en el breaking, la perspectiva de ver esta forma de arte urbano presentada en los Juegos Olímpicos es simplemente increíble. Él enfatiza el impacto transformador que tal movimiento podría tener en la comunidad global de breaking, brindando nuevas oportunidades y exposición para los bailarines de todo el mundo. Reflexionando sobre la evolución del breaking desde su apogeo en la década de 1980, Swifty reconoce los avances que se han logrado para elevar el estatus de esta forma de baile desde sus humildes comienzos. Con el breaking ahora listo para potencialmente unirse a las filas de los deportes olímpicos reconocidos, esto significa un cambio significativo en la percepción y aceptación de la cultura urbana dentro de los eventos deportivos principales. Mientras continúan las discusiones sobre la inclusión del breaking en los Juegos Olímpicos de París, el fervor y entusiasmo de defensores como Swifty solo sirven para subrayar la importancia cultural y la destreza atlética que este vibrante estilo de baile encarna. Con su fusión de arte y atletismo, la potencial presencia del breaking en el escenario olímpico podría marcar un momento revolucionario para una comunidad que durante mucho tiempo ha prosperado en su creatividad y pasión por el movimiento.