Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
El Super Bowl de este año no se trata solo del choque entre dos titanes del fútbol americano; también se trata del impacto de superestrellas fuera del campo, con figuras como Taylor Swift y Lionel Messi tomando el centro de atención en el deporte estadounidense. Los seguidores de Taylor Swift en todo el país se están preparando para echar un vistazo a la cantante en el estadio Allegiant en Las Vegas, donde estará apoyando a su novio, Travis Kelce de los Kansas City Chiefs. Una reciente encuesta de la Universidad de Seton Hall reveló que un significativo 21% de estadounidenses sintonizarán el Super Bowl solo para ver a Swift, mostrando la influencia innegable que ejerce. Mientras tanto, desde su fichaje con el Inter Miami de la MLS en julio, Lionel Messi ha estado causando sensación en la escena deportiva estadounidense. Con su próxima aparición en un comercial durante el Super Bowl, Messi continúa atrayendo atención y aumentando el interés por el fútbol en todo el país. Tanto Swift como Messi poseen un imán que trasciende mercados y genera importantes impactos económicos. Se proyecta que la gira Eras de Swift será uno de los conciertos más lucrativos en la historia de Estados Unidos, con estimaciones que sugieren que podría generar miles de millones. Del mismo modo, la llegada de Messi al Inter Miami ha resultado en partidos con entradas agotadas, un aumento en la audiencia y un notable aumento en la valuación del club. La influencia de estas superestrellas internacionales se extiende más allá de la arena deportiva y alcanza diferentes negocios, desde impulsar las ventas de mercancía hasta aumentar los números de audiencia. Swift y Messi no son solo celebridades; son marcas en sí mismos, capaces de desatar frenesíes y generar ingresos donde sea que vayan. Sin embargo, el impacto de Swift y Messi difiere en términos de sus respectivas ligas deportivas. Mientras Messi ha sido reconocido por cambiar la narrativa de la MLS y elevar el estatus de la liga a nivel mundial, la influencia de Swift en la NFL, aunque significativa, podría no tener un efecto duradero a menos que se realicen esfuerzos estratégicos para aprovechar el interés que ha generado en la liga. Mientras los aficionados esperan con entusiasmo el espectáculo del Super Bowl, todas las miradas estarán puestas no solo en los jugadores en el campo, sino también en las personalidades sobredimensionadas de Taylor Swift y Lionel Messi, cuyo impacto de superestrellas continúa moldeando el panorama del deporte estadounidense y más allá.