La Superliga sufre revés con registro ante la UE antes de vista contra FIFA y UEFA

La Superliga sufre un revés en el registro ante la UE un día antes de la vista oral contra la FIFA y la UEFA Este jueves, en Madrid, está prevista la vista oral de la Superliga contra la FIFA y la UEFA, acusándolas de abuso de posición dominante. Sin embargo, el proyecto ha sufrido un revés antes de la audiencia, ya que la autoridad registral de la Unión Europea ha fallado a favor de la Asociación de Clubes Profesionales de Dinamarca en cuanto a la propiedad del nombre. La compañía European Super League intentó registrar su marca en la UE, pero se determinó que infringiría los derechos de la Superliga, propiedad conjunta de los clubes daneses. Este fallo, sujeto a apelación, obligaría a los promotores del proyecto europeo a buscar otro nombre para la competición. El presidente de la máxima categoría del fútbol danés, Claus Thomsen, expresó su satisfacción por la decisión, indicando que la marca 'The Super League' violaría el valor invertido por los clubes daneses en la 3F Superliga. Thomsen reiteró su oposición a la Superliga europea, abogando por la apertura y la clasificación a torneos internacionales a través de las ligas nacionales. En Madrid, la vista oral del caso Superliga se llevará a cabo en el juzgado de lo Mercantil nº 17 a partir de las 10:00 horas. El Real Madrid y sus socios denunciaron posibles abusos de posición dominante por parte de la UEFA y la FIFA. Este caso fue remitido al Tribunal de Justicia de la Unión Europea, que el pasado diciembre dictaminó ilegal el veto de la UEFA y la FIFA a la organización de la Superliga, concluyendo que las normas de estas asociaciones no garantizan transparencia, proporcionalidad y objetividad. El Alto Tribunal europeo señaló que la FIFA y la UEFA están abusando de su posición dominante al tener control exclusivo sobre la explotación comercial de los derechos de las competiciones que organizan. Esta situación podría perjudicar a los clubes europeos, a las empresas en el mercado de los medios de difusión y a los consumidores, al impedirles beneficiarse de nuevas competiciones innovadoras.