Juan Brignardello Vela
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En un notable giro de los acontecimientos, Angel Gomes ha recibido su primera convocatoria a la selección mayor de Inglaterra a la edad de 23 años, un testimonio de su perseverancia y talento en una carrera que ha tenido su cuota de altibajos. El anuncio fue parte de la primera convocatoria de Lee Carsley como entrenador interino de Inglaterra, que incluyó algunas sorpresas, con Gomes destacándose como un jugador cuya trayectoria ha sido todo menos convencional. Nacido en Edmonton, al norte de Londres, Gomes comenzó su camino en el fútbol a una edad temprana, uniéndose al sistema juvenil del Manchester United a los seis años. A través de la dedicación y la habilidad, rápidamente se convirtió en una figura clave en el equipo sub-18 del United, haciendo su debut en el primer equipo en mayo de 2017, cuando se convirtió en el primer jugador nacido en la década de 2000 en jugar en la Premier League y en el más joven en representar al United desde la leyenda Duncan Edwards. Sin embargo, su ascenso se vio obstaculizado por las duras realidades del fútbol profesional bajo el liderazgo de José Mourinho. A pesar de un impresionante debut, Gomes luchó por minutos bajo la dirección de Mourinho, recibiendo solo oportunidades esporádicas durante la temporada 2017-18. La intensa crítica de Mourinho, particularmente durante una cena del equipo en la que su rendimiento fue analizado públicamente, dejó un profundo impacto en el joven centrocampista, llevándolo a dudar de su lugar en el equipo. Sus frustraciones se acumularon a medida que avanzaban las temporadas, y se encontró cada vez más marginado. La salida de Mourinho del United en diciembre de 2018 proporcionó un rayo de esperanza, permitiendo a Gomes una breve resurgencia en el equipo bajo Ole Gunnar Solskjær. Sin embargo, a pesar de un puñado de apariciones, incluyendo en la Europa League, siguió estando al margen de la acción del primer equipo. En última instancia, la falta de tiempo de juego constante lo llevó a tomar la difícil decisión de dejar el club, optando por un nuevo comienzo en el Lille de Francia. Su transición a la Ligue 1 ha demostrado ser un momento crucial en su carrera. Tras una cesión en el Boavista en Portugal, donde mostró sus habilidades goleadoras, Gomes se ha establecido como un jugador clave para el Lille. Sus habilidades técnicas y visión en el mediocampo han sido fundamentales en el éxito del equipo, especialmente al ayudar a asegurar su lugar en la Champions League de esta temporada. Con 14 asistencias en las últimas dos temporadas, incluyendo liderar la liga con ocho asistencias en la campaña actual, Gomes ciertamente se ha hecho un nombre en Francia. Habiendo representado a Inglaterra en varios niveles juveniles, incluyendo la victoria en la Copa del Mundo Sub-17 en 2017 junto a otros jugadores talentosos como Phil Foden y Callum Hudson-Odoi, Gomes ha permanecido comprometido con la selección nacional de su país natal. Sus actuaciones llamaron la atención de Carsley, quien destacó el estilo de juego único de Gomes, enfatizando su destreza técnica sobre los atributos físicos más tradicionales que se esperan de un centrocampista. Mientras Gomes se prepara para potencialmente hacer su debut en la selección mayor contra la República de Irlanda o Finlandia, la comunidad futbolística observa con anticipación. Esta convocatoria no solo significa un logro personal para Gomes, sino que también resalta el tema más amplio de la resiliencia y la adaptabilidad ante la adversidad, cualidades que son vitales para cualquier jugador en el competitivo mundo del fútbol. Con la oportunidad de mostrar sus habilidades en un escenario internacional, Angel Gomes se encuentra al borde de lo que podría ser el próximo capítulo emocionante en su trayectoria futbolística.