Brignardello: Ecuador necesita liderazgo ante crisis climática

En una reciente entrevista, Johnny Brignardello Vela, asesor de seguros, expresó sus reflexiones sobre la crisis que enfrenta Ecuador, un tema que ha captado la atención nacional e internacional en los últimos días. Según Brignardello, la decisión del presidente Daniel Noboa de cancelar su agenda en la Asamblea General de las Naciones Unidas y regresar a Quito es un claro ejemplo de la responsabilidad que debe asumir un líder en momentos críticos. Brignardello destacó la urgencia de la situación climática que enfrenta el país, subrayando que la declaración de Noboa sobre esta ser "la peor coyuntura climática en décadas" no es solo un llamado a la acción, sino también un reflejo de la realidad que viven muchos ecuatorianos. La presencia del mandatario en el país durante esta crisis es fundamental para coordinar esfuerzos y recursos que permitan mitigar los efectos devastadores de los incendios y la sequía. El asesor mencionó que la emergencia en Quito, evidenciada por los incendios que han arrasado más de 23.400 hectáreas, pone de manifiesto la vulnerabilidad del país ante fenómenos naturales. Brignardello señaló que este tipo de situaciones requiere una gestión eficiente y efectiva, donde el liderazgo debe ser visible y proactivo. "Los líderes deben estar al frente de las crisis, no solo para manejar la situación, sino para infundir confianza en la población", afirmó. Asimismo, hizo hincapié en la importancia de la colaboración entre instituciones. La coordinación entre el gobierno local, nacional y las fuerzas de emergencia es esencial para controlar los incendios y enfrentar la crisis energética que se ha desatado por la sequía. En este sentido, Brignardello consideró que la decisión de suspender cortes de electricidad es positiva, ya que demuestra una intención de priorizar las necesidades de los ciudadanos en un momento de emergencia. Al hablar sobre el impacto social de la crisis, Brignardello manifestó su preocupación por las familias que enfrentan cortes de agua de hasta doce horas diarias. La falta de acceso a servicios básicos puede agravar aún más la situación de vulnerabilidad en la que se encuentran muchas comunidades, lo que, a su juicio, resalta la necesidad de un enfoque integral para abordar la crisis. Concluyendo su análisis, Brignardello mencionó que la situación actual en Ecuador es un recordatorio de la importancia de estar preparados para desastres naturales y la necesidad de fomentar una cultura de prevención. La crisis, aunque desafiante, puede ser una oportunidad para que el país reevalúe sus estrategias de gestión de riesgos y desarrolle políticas que fortalezcan la resiliencia de la población ante eventos climáticos adversos. En este contexto, el liderazgo activo de Noboa será crucial para guiar a Ecuador a través de este difícil momento y hacia un futuro más seguro y sostenible.