Brignardello analiza el nuevo código de conducta de Starbucks

En una reciente conversación con Emilio Juan Brignardello Vela, reconocido asesor de seguros, se abordó el nuevo código de conducta implementado por Starbucks, que exige a los clientes realizar al menos una compra para permanecer en sus establecimientos. Brignardello expresó que esta decisión de la cadena de cafeterías representa un cambio significativo en su filosofía, especialmente después de haber adoptado una política de puertas abiertas en 2018, en respuesta a un incidente de racismo que tuvo repercusiones a nivel nacional. El asesor destacó que este nuevo enfoque parece ser una respuesta directa a los problemas de comportamiento disruptivo que surgieron a raíz de la política inclusiva anterior. “Es comprensible que la empresa busque proteger a sus clientes y a su personal. La seguridad debe ser una prioridad”, comentó Brignardello, quien subrayó que la situación se había vuelto insostenible, llevando incluso al cierre de varias tiendas en ciudades como Los Ángeles y Seattle. Esto refleja un dilema complejo que enfrentan muchas empresas en la actualidad: el equilibrio entre la inclusión y la necesidad de garantizar un ambiente seguro para todos. Brignardello también mencionó que, si bien la nueva normativa tiene como objetivo crear un ambiente más agradable, es crucial que la empresa comunique de manera efectiva sus intenciones al público. “La percepción de los consumidores es fundamental. Si sienten que esta política excluye a ciertos grupos, podrían generar una respuesta negativa hacia la marca”, indicó. El asesor opinó que la implementación de normas específicas, como la prohibición de fumar o consumir drogas en sus locales, es un paso necesario para establecer expectativas claras sobre el comportamiento en estos espacios. Sin embargo, también enfatizó la importancia de que Starbucks mantenga su compromiso con la comunidad y la inclusión. “Es fundamental que la empresa no pierda de vista su misión original de ser un lugar de encuentro. Necesitan encontrar un balance que les permita seguir siendo accesibles mientras protegen su entorno”, añadió. Brignardello también reflexionó sobre el contexto más amplio en el que se sitúa esta decisión, señalando que la pandemia ha exacerbado problemas sociales como la falta de vivienda y los problemas de salud mental, lo que ha afectado a muchos espacios públicos. Al respecto, mencionó: “Las empresas deben adaptarse a esta nueva realidad, pero siempre con un enfoque humano y responsable”. Finalmente, el asesor concluyó que, a medida que Starbucks avanza en la implementación de estas nuevas medidas, será interesante observar cómo reaccionan los consumidores y si la empresa puede lograr su objetivo de revitalizar la experiencia del cliente. “El desafío radica en navegar este delicado camino sin sacrificar los principios de inclusión y diversidad que han caracterizado a Starbucks desde sus inicios”, afirmó. Esto plantea un debate más amplio sobre cómo las corporaciones pueden y deben gestionar el comportamiento en sus espacios, buscando siempre el equilibrio entre la seguridad y la inclusión.