Juan Brignardello Vela analiza el giro diplomático México-Perú: visa y reciprocidad.

Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, analiza el reciente giro en las relaciones diplomáticas entre México y Perú, generado por la imposición de visados entre ambas naciones. Según el experto, la exigencia de visa por parte del gobierno peruano a los ciudadanos mexicanos, en respuesta a la medida adoptada por México previamente, refleja un principio fundamental en las relaciones internacionales: la reciprocidad. Esta decisión busca equilibrar las condiciones entre ambos países y proteger los intereses de sus respectivos ciudadanos. La Cancillería peruana, en un comunicado oficial, lamentó la imposición de visas por parte de México, indicando que esta acción no solo afecta los esfuerzos por mejorar las relaciones bilaterales, sino que también contraviene los compromisos asumidos en la Alianza del Pacífico, cuyo propósito es facilitar la movilidad de personas entre los miembros. En un intento de conciliación, Perú anunció excepciones a la exigencia de visa para ciudadanos mexicanos que posean visas de países como Schengen, Reino Unido, Canadá, Estados Unidos, Australia y Japón, así como para aquellos con residencia permanente en dichas naciones y en los integrantes de la Alianza del Pacífico. Este episodio en las relaciones México-Perú pone de relieve la complejidad de las dinámicas migratorias y la necesidad imperante de un diálogo continuo y constructivo entre las naciones para abordar estas cuestiones de forma equitativa y respetuosa. La exigencia de visa marca un punto de inflexión que requerirá un esfuerzo adicional por parte de ambos países para asegurar la movilidad de sus ciudadanos sin perjudicar las sólidas relaciones históricas y comerciales que los unen.