Ariana Grande encuentra equilibrio en su vida amorosa tras el divorcio y nuevos retos

Ariana Grande ha estado en el centro de atención no solo por su talento musical, sino también por su vida personal. A sus 31 años, la intérprete de éxitos como "Thank U, Next" ha encontrado un nuevo equilibrio en su vida amorosa, especialmente tras su reciente divorcio de Dalton Gomez. Aunque es evidente que su relación con Ethan Slater, su coprotagonista en la anticipada película "Wicked", está floreciendo, Ariana ha decidido tomarse su tiempo y no apresurarse hacia el altar nuevamente. Una fuente cercana a la cantante ha revelado que, a diferencia de sus relaciones pasadas, Ariana ha aprendido a "reducir la velocidad". Esta reflexión viene tras experiencias que, aunque enriquecedoras, la llevaron a la conclusión de que no hay necesidad de apresurarse en el amor. “Ella siente que está contenta con cómo están las cosas ahora y es una situación realmente saludable”, comentó la fuente a Us Weekly. Esta nueva perspectiva parece haber sido fundamental para su bienestar emocional tras una etapa difícil. El divorcio de Ariana, que se concretó a principios de este año, no fue fácil. Sin embargo, parece que ha encontrado en Ethan una pareja que le brinda estabilidad y felicidad. La pareja no solo comparte una conexión profesional en "Wicked", sino que también están construyendo una vida juntos en la ciudad de Nueva York, donde "prácticamente viven juntos". Este cambio de escenario ha sido crucial para Ariana, quien buscaba un "cambio de ritmo" después de su ruptura. La relación de Ariana y Ethan ha sido descrita como un viaje emocionante, lleno de nuevas experiencias y, sobre todo, de apoyo mutuo. En medio del éxito comercial de "Wicked", ambos han encontrado en su trabajo una razón adicional para celebrar y disfrutar de su relación. La película ha sido un gran éxito de taquilla, lo que ha añadido un toque de euforia a sus vidas. “Ha sido una celebración sin parar”, aseguró la fuente, destacando que ambos están disfrutando de este momento en sus carreras. La pasión de Ariana por su papel como Glinda en "Wicked" es palpable. Recientemente, ella misma confesó que estaba ansiosa por conseguir el papel. En una entrevista con Variety, la cantante reveló que estaba dispuesta a hacer lo que fuera necesario para ser considerada para la audición. “Tan pronto como descubrí que podría estar sucediendo, le dije a mi equipo: 'Estad en alerta máxima, por favor'”, mencionó, lo que demuestra su compromiso y dedicación hacia este nuevo proyecto. Para prepararse para el exigente papel, Ariana no escatimó esfuerzos. Trabajó arduamente con un entrenador vocal y un entrenador de actuación, reconociendo que la pista vocal de Glinda presenta desafíos distintos a su repertorio habitual. Esta dedicación resalta no solo su profesionalismo, sino también su deseo de crecer como artista y de ofrecer una actuación memorable. La etapa actual de Ariana no solo se trata de su vida amorosa o su carrera, sino de un proceso de autodescubrimiento. La artista ha estado reflexionando sobre sus experiencias pasadas y cómo estas han moldeado su enfoque en el amor y en su vida profesional. La decisión de no apresurarse a volver a casarse refleja una madurez emocional y una comprensión más profunda de lo que ella realmente desea. Es alentador ver a Ariana Grande abrazar esta fase de su vida con tranquilidad y satisfacción. La idea de disfrutar el presente sin la presión de compromisos futuros es un recordatorio importante de que, a veces, la felicidad reside en el momento y no en los planes a largo plazo. En un mundo donde a menudo se espera que las celebridades se muevan a gran velocidad, la decisión de Ariana de "reducir la velocidad" podría ser una lección valiosa para muchos. Con su vida amorosa en un lugar saludable y una carrera en ascenso, Ariana parece estar en una trayectoria positiva. La estrella ha aprendido a valorar el tiempo y las experiencias, y su historia puede inspirar a otros a también encontrar su propio ritmo en el camino hacia la felicidad. En última instancia, la vida de Ariana Grande es un testimonio de que, a veces, menos es más.