Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
La icónica pareja de Hollywood, Michael Douglas y Catherine Zeta-Jones, ha decidido dar un paso significativo en su vida personal al poner a la venta su espléndida mansión en Irvington, Nueva York, por un precio de 11 millones de euros. Este anuncio ha capturado la atención de los medios y de los amantes de las propiedades de lujo, no solo por la fama de sus propietarios, sino también por la rica historia que alberga el inmueble. Construida en 1929 y conocida como Longmeadow, esta majestuosa mansión de estilo georgiano se erige a orillas del río Hudson, ofreciendo un refugio de paz y tranquilidad a tan solo 40 kilómetros de la ciudad de Nueva York. La propiedad no solo es un testimonio de la elegancia arquitectónica de su época, sino que también ofrece un espacio generoso de 1.078 metros cuadrados distribuidos en cuatro plantas, incluyendo ocho dormitorios, diez baños completos y dos aseos. Este amplio diseño la convierte en un lugar ideal tanto para la vida familiar como para la recepción de invitados. La decisión de Douglas y Zeta-Jones de vender Longmeadow llega en un momento especial de sus vidas. Con dos hijos ya adultos, Dylan y Carys, la pareja busca disfrutar de nuevas experiencias, viajando por Europa y las Bermudas, donde también poseen propiedades. Este cambio de rumbo es emblemático de cómo la pareja ha transitado a lo largo de los años, mostrando que el amor y la dedicación mutua han sido fundamentales en su relación desde su matrimonio en el año 2000. La mansión no solo se destaca por su esbelto diseño, sino también por su historia llena de renombre. Antes de ser adquirida por la pareja, Longmeadow fue hogar de figuras prominentes como Charles Lewis Tiffany, fundador de la icónica firma Tiffany & Co., y la familia Matthiesen, conocidos comerciantes de azúcar. Además, la propiedad ha sido escenario de eventos destacados, incluyendo una recaudación de fondos privada para la campaña de reelección del presidente Joe Biden en abril de 2023, lo que añade una capa de relevancia contemporánea a su rica historia. Desde que adquirieron la mansión en 2019, Douglas y Zeta-Jones han invertido en renovaciones que han modernizado el hogar sin sacrificar su carácter histórico. Han respetado meticulosamente los detalles arquitectónicos originales, manteniendo las maderas nobles y las chimeneas antiguas, lo que añade un valor sentimental y estético a la propiedad. Entre las estancias más destacadas se encuentran un elegante salón con bar, varias salas de estar con chimeneas, y un comedor formal que puede albergar a doce comensales. La cocina, completamente renovada, se presenta como un sueño para los amantes de la gastronomía, con su diseño contemporáneo, gabinetes blancos y electrodomésticos de alta gama. Aquí, cada detalle ha sido pensado para ofrecer un espacio funcional y acogedor. Sin embargo, uno de los puntos culminantes de Longmeadow es, sin duda, la biblioteca de dos plantas, revestida en roble, que se conecta a través de una extraordinaria escalera de caracol, creando un ambiente de tranquilidad y sofisticación. En el nivel inferior, la mansión invita al entretenimiento con espacios diseñados para la diversión y el relax. Este área cuenta con un gimnasio completamente equipado y una piscina cubierta climatizada, la cual se nutre de grandes ventanales que permiten disfrutar de las vistas al exterior. Estos lujosos espacios son perfectos para aquellos que buscan un estilo de vida indulgente y relajado, así como la posibilidad de disfrutar de momentos memorables con amigos y familiares. La suite principal es otro de los muchos atractivos de esta magnífica propiedad. Con su propia área de estar, chimenea, vestidor y un baño de mármol, este espacio ha sido diseñado para ofrecer la máxima comodidad y privacidad. Cada rincón de Longmeadow refleja la atención al detalle y el amor que sus dueños han puesto en la propiedad a lo largo de los años. El exterior de la mansión es tan impresionante como su interior. Amplios jardines, que se extienden hasta las orillas del río Hudson, crean un entorno natural que invita a la contemplación y el disfrute. La propiedad también cuenta con zonas de comedor al aire libre, ideales para organizar cenas en las cálidas noches de verano, y un garaje con capacidad para cuatro vehículos, asegurando que el lujo y la funcionalidad coexistan en este singular hogar. La venta de Longmeadow representa no solo una oportunidad única de adquirir una propiedad de lujo con una rica historia, sino también la posibilidad de formar parte de un legado que ha sido cuidado y nutrido por una de las parejas más emblemáticas de la industria del entretenimiento. Con un precio inicial de 11 millones de euros, esta mansión se convierte en un referente en el mercado inmobiliario de lujo, destinada a atraer a compradores que valoren tanto la exclusividad como el encanto histórico que solo Longmeadow puede ofrecer.