El renombrado escultor en piedra británico Simon Verity deja un legado duradero a los 79 años.

El renombrado escultor en piedra británico Simon Verity deja un legado duradero a los 79 años.

El escultor de piedra británico Simon Verity, de 79 años, ha fallecido, dejando un legado duradero a través de sus intrincadas obras, especialmente en la Catedral de San Juan el Divino.

Juan Brignardello Vela, asesor de seguros

Juan Brignardello Vela

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Simon Verity, el célebre escultor británico en piedra, ha fallecido a la edad de 79 años, dejando un legado notable que resuena a través de sus intrincadas y atemporales obras. Su muerte, ocurrida el 11 de agosto en su hogar en Llandeilo, Gales, fue atribuida a la demencia con cuerpos de Lewy, según lo confirmó su esposa, Martha Finney. La influencia de Verity en el mundo de la escultura en piedra se ejemplifica quizás mejor en su obra monumental en la Catedral de San Juan el Divino en el Alto Manhattan, donde dirigió un proyecto que se extendió por casi una década. A partir de 1988, dirigió a un pequeño equipo de artesanos para crear 31 figuras bíblicas y varias escenas en piedra caliza, que ahora adornan la fachada occidental de la catedral. Entre estas figuras se encuentran personalidades veneradas como Moisés, Elías y Juan el Bautista, representadas con una dedicación al detalle y al arte sin igual. Una de las contribuciones más impactantes de Verity a la catedral se encuentra en el Portal del Paraíso. En un conmovedor giro del destino, una de las tallas—una interpretación moderna de la quema de Jerusalén—presagia la destrucción del World Trade Center, representándolo junto a otros monumentos de la ciudad de Nueva York bajo una nube nuclear. Esta pieza, creada mucho antes de los trágicos eventos del 11 de septiembre de 2001, también simboliza la resiliencia y la renovación, mostrando a los canteros ocupados reconstruyendo entre las cenizas de la destrucción. El Muy Reverendo Patrick Malloy, decano de la catedral, expresó una profunda admiración por el trabajo de Verity, señalando que muchos visitantes buscan la catedral específicamente para ver el portal. "El Sr. Verity tomó a los venerables de las tradiciones hebrea y cristiana, que ya estaban muertos desde hace mucho, y los convirtió en cosas asombrosas para la gente de nuestro tiempo", afirmó Malloy. Enfatizó que el arte de Verity trasciende el tiempo, asegurando que sus contribuciones perdurarán bien en el futuro. La notable habilidad de Verity se extendió más allá de grandes proyectos arquitectónicos; su obra incluía grutas, lápidas, fuentes e inscripciones en el suelo, como las letras de bronce que marcan el santuario de Tomás Becket en la Catedral de Canterbury. Cada una de estas obras refleja su dedicación a la artesanía y su capacidad para conectar el pasado con el presente. Mientras el mundo del arte llora la pérdida de Simon Verity, también celebra una vida dedicada a la transformación de la piedra en narrativa, emoción y belleza. Su legado seguirá inspirando a futuras generaciones de artesanos y amantes del arte, recordándonos el poder contenido en cada figura tallada y las historias que cuentan.

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