Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
La espera ha terminado y los fanáticos de "Shuumatsu no Valkyrie: Record of Ragnarok" finalmente pueden disfrutar del esperado capítulo 92, titulado "Promesa". Este episodio continúa la intensa batalla por la salvación de la humanidad, centrada en el enfrentamiento entre dos legendarios espadachines: Okita Souji y Susano'o no Mikoto. La tensión y el drama se desenvuelven en una narrativa que no solo se enfoca en la lucha física, sino también en los dilemas internos y las promesas del pasado que siguen resonando en el presente. Desde el inicio, el capítulo nos sumerge en los recuerdos de Okita, quien se encuentra frente a la muerte y reflexiona sobre una promesa hecha al Señor Kondo, una figura paternal que ha guiado su camino. Este flashback al Japón feudal es fundamental para comprender la profundidad del personaje de Okita y su constante lucha por ser un verdadero samurái. A medida que se desarrolla la historia, el lector puede sentir el peso de la culpa que Okita lleva consigo, así como su deseo de redimirse y cumplir con las expectativas que ha creado en su mente. El diálogo entre Okita y Kondo es conmovedor, y las enseñanzas sobre el bushido y la verdadera naturaleza de un samurái añaden un trasfondo filosófico a la trama. La frase clave que resuena en la mente de Okita – "un verdadero samurái es aquel que pone su vida en sus convicciones y se despide de este mundo con una sonrisa" – se convierte en un mantra que guía su valiente lucha. Esta interconexión entre el pasado y el presente es un tema recurrente en el manga, y en este capítulo, alcanza un nuevo nivel de significado. A medida que el combate se intensifica, la lucha entre Okita y Susano'o refleja no solo la pelea física, sino también el conflicto interno de Okita con su demonio interno, Onigo. Este elemento agrega una capa de complejidad a la narrativa, mostrando cómo la lucha personal y la búsqueda de identidad se entrelazan con la batalla por la supervivencia. La conexión de Okita con su demonio es un recordatorio de que, a veces, nuestros mayores desafíos provienen de dentro, y su lucha por superarlos es lo que lo convierte en un verdadero samurái. El clímax del capítulo llega cuando, a pesar de estar gravemente herido y al borde de la muerte, Okita se levanta y reafirma su compromiso con la promesa hecha a Kondo. Esta escena es poderosa y llena de emoción, no solo para el personaje, sino también para el lector, que se ve envuelto en la determinación inquebrantable de Okita. Su grito de que "aún no ha cumplido con su promesa" resuena en las gradas, generando una mezcla de sorpresa y admiración entre los espectadores. A lo largo del capítulo, la transición entre el pasado y el presente es magistral, permitiendo a los lectores conocer el trasfondo de Okita y entender la importancia de su lucha. Esta técnica narrativa no solo enriquece la historia, sino que también establece una conexión emocional más fuerte con los personajes. La historia de Okita es un viaje de autodescubrimiento y redención que resuena con muchos, lo que hace que su lucha sea aún más significativa. La batalla contra Susano'o no es solo una prueba de fuerza, sino una prueba de convicciones. Cada golpe y cada movimiento en el campo de batalla simbolizan la lucha interna de Okita, quien ha tenido que enfrentarse a sus propios demonios. La culminación de su viaje se refleja en su decisión de luchar hasta el final, incluso si eso significa enfrentarse a una muerte segura. Esta elección resuena profundamente con los valores del bushido y el espíritu samurái, lo que hace que su historia sea aún más inspiradora. El capítulo culmina con una emotiva despedida de Okita a su amigo y mentor, el Señor Kondo, quien observa con lágrimas en los ojos. La relación entre ambos es una de las más significativas del manga, y la lección de vida que Kondo le impartió a Okita se convierte en el motor de su lucha final. La conexión entre maestro y discípulo es un recordatorio de que nuestras acciones y decisiones están siempre influenciadas por aquellos que nos han guiado en nuestro camino. Finalmente, el capítulo 92 de "Shuumatsu no Valkyrie: Record of Ragnarok" no solo avanza la trama de la batalla, sino que también profundiza en el desarrollo de sus personajes, especialmente el de Okita Souji. Su lucha es una amalgama de determinación, sacrificio y el deseo de ser recordado como un verdadero samurái. La emoción y la intensidad de este capítulo son un testamento de la habilidad del autor para entrelazar acción y narrativa emocional, dejando a los lectores ansiosos por más en los próximos episodios. Con el lanzamiento del manga en la plataforma de Manga Plus, los seguidores de esta épica serie tienen mucho que esperar en su camino hacia la culminación del Ragnarok.