Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
A medida que el Brexit continúa evolucionando, las empresas en Irlanda del Norte expresan una creciente preocupación por los próximos cambios en los acuerdos comerciales con Gran Bretaña. La última fase de las regulaciones comerciales está a punto de introducir nuevos requisitos para las empresas de paquetería, lo que plantea interrogantes sobre el futuro del comercio transfronterizo. En un anuncio reciente, los funcionarios aseguraron que no habría nuevos requisitos para los paquetes de consumidor a consumidor, lo que significa que los individuos deberían experimentar pocas o ninguna alteración al comprar en minoristas de Gran Bretaña. Esta garantía tiene como objetivo mitigar las preocupaciones entre los consumidores que se han acostumbrado a la facilidad de las compras en línea a través del Reino Unido. Sin embargo, la situación se vuelve más compleja para las empresas de paquetería encargadas de entregar bienes desde Gran Bretaña a los consumidores en Irlanda del Norte. Estas empresas ahora deberán participar en un nuevo esquema de comerciantes de confianza conocido como el Esquema de Transportistas del Reino Unido (UK Carrier Scheme, UCS). Aunque este esquema no exige declaraciones aduaneras, sí requiere que los operadores de paquetería proporcionen información específica a la Agencia de Ingresos y Aduanas de Su Majestad (HMRC). Entre otras responsabilidades, deben tener protocolos para diferenciar si los bienes enviados están destinados a particulares o a empresas. La implicación más significativa de estos cambios recae en las transacciones de empresa a empresa. Las empresas que envían bienes entre Gran Bretaña e Irlanda del Norte deberán utilizar el Esquema del Mercado Interno del Reino Unido (UKIMS), que exige una declaración aduanera simplificada para los bienes considerados 'no en riesgo' de ser enviados a la UE. Para los artículos clasificados como 'en riesgo', se aplicarán procedimientos aduaneros completos, lo que creará posibles retrasos y complicaciones en la cadena de suministro. Es importante destacar que las empresas que envían exclusivamente paquetes a consumidores estarán exentas de los requisitos de registro del UKIMS. Esta distinción está destinada a agilizar los procesos para los minoristas más pequeños y los vendedores individuales, pero poco hace para aliviar las incertidumbres generales que enfrentan las empresas involucradas en el comercio transfronterizo. El mayor operador de paquetería del Reino Unido, Royal Mail, se ha comprometido a colaborar estrechamente con el gobierno y sus clientes para garantizar una transición fluida durante estos cambios. Sin embargo, a medida que las empresas se preparan para las nuevas regulaciones, muchas se preguntan cómo estos requisitos adicionales impactarán sus operaciones y la eficiencia general del movimiento de mercancías. Con la fecha límite para la implementación acercándose, las empresas de Irlanda del Norte están pidiendo claridad y apoyo para navegar por este complejo panorama. Las discusiones en curso entre las partes interesadas, incluidas las empresas y los representantes de la UE, serán fundamentales para dar forma a un entorno comercial que fomente el crecimiento y la estabilidad tras el Brexit. A medida que la región lidia con estos cambios, el enfoque sigue siendo garantizar que la economía de Irlanda del Norte no soporte el peso de los obstáculos burocráticos en la búsqueda de relaciones comerciales fluidas con Gran Bretaña.