La polémica candidatura de Alberto Fujimori: Antecedentes penales y salud frágil desafían su postulación en Perú.

El expresidente peruano Alberto Fujimori, controvertido por sus antecedentes penales y su salud frágil, ha generado revuelo al anunciar su intención de postularse para un tercer mandato presidencial en las elecciones de 2026. La noticia fue confirmada por su hija, Keiko Fujimori, líder del principal partido de derecha en Perú, quien anunció a través de sus redes sociales la decisión tomada en conjunto con su padre, a pesar de los desafíos que esto conlleva. Fujimori, de ascendencia japonesa, gobernó Perú con mano firme durante la década de 1990, siendo reconocido por la derrota de la guerrilla maoísta Sendero Luminoso. Sin embargo, su legado está marcado por condenas por violaciones a los derechos humanos, incluidas dos matanzas de civiles cometidas por un escuadrón del ejército bajo su mandato. Tras pasar 16 años en prisión por estos crímenes, fue liberado en 2023 mediante un indulto cuestionado por organismos internacionales. Uno de los principales obstáculos legales que enfrenta Fujimori para su candidatura es una deuda de reparación civil pendiente de aproximadamente 15,5 millones de dólares, derivada de condenas judiciales previas. Expertos legales han señalado que el indulto otorgado al expresidente no elimina su responsabilidad penal, lo que podría impedirle postularse nuevamente a la presidencia de Perú. A pesar de la incertidumbre legal, Keiko Fujimori ha dejado en claro que no planea acompañar a su padre como candidata a la vicepresidencia, prefiriendo enfocarse en su rol como presidenta del partido para apoyar la campaña electoral. El fujimorismo, con una fuerte presencia en el Congreso peruano, se prepara para respaldar la candidatura de Alberto Fujimori, consolidando su posición en la política nacional. La salud delicada del exmandatario también se presenta como un desafío importante en su camino hacia la presidencia. Recientemente se dio a conocer que Fujimori padece un tumor maligno en la lengua, sumado a antecedentes de problemas de salud previos, como un tumor pulmonar detectado en 2018 y un accidente de cadera reciente. Su estado de salud será un factor determinante en su capacidad para asumir una eventual presidencia en 2026. A pesar de las dificultades que enfrenta, Keiko Fujimori ha manifestado su confianza en la recuperación de su padre y en su capacidad para liderar el país. Sin embargo, la incertidumbre legal y los desafíos de salud plantean interrogantes sobre la viabilidad de la candidatura de Alberto Fujimori. Las autoridades electorales aún no se han pronunciado al respecto, dejando en suspenso la participación del expresidente en las próximas elecciones presidenciales en Perú.