Netflix se enfrenta a una demanda de $170 millones por presunta difamación del personaje "Baby Reindeer".

Una mujer ha presentado una demanda contra el gigante del streaming Netflix, buscando más de $170 millones en daños por difamación, negligencia y violaciones de privacidad relacionadas con la exitosa serie dramática "Baby Reindeer". Fiona Harvey, una abogada del Reino Unido, afirma que el personaje Martha en el programa está basado en ella y que Netflix la retrató falsamente como una criminal condenada que se dedicaba al acoso y agresión sexual. En la demanda presentada en un tribunal de California, Harvey alega que Netflix contó "mentiras brutales" sobre ella a una audiencia de más de 50 millones de espectadores en todo el mundo. Asegura que la serie la representó de manera negativa, dañando su reputación e invadiendo su privacidad. Una escena en particular en el programa muestra al personaje Martha agrediendo sexualmente al protagonista, lo que añade a la angustia y daño causado a Harvey. La demanda afirma que Netflix perpetuó estas falsedades porque hacían una historia más atractiva y aumentaban la audiencia, priorizando las ganancias sobre la verdad. Harvey expresó confianza en el resultado del caso, declarando a la BBC News que cree firmemente que Netflix perderá. La batalla legal destaca las complejidades de equilibrar la narración creativa con implicaciones en la vida real y la responsabilidad de las empresas de entretenimiento de verificar la precisión de sus representaciones. La serie "Baby Reindeer" pretende estar basada en hechos reales pero ficcionalizada con propósitos dramáticos. Sin embargo, la demanda de Harvey plantea preguntas sobre hasta qué punto el programa reflejaba con precisión las experiencias de su creador y protagonista, Richard Gadd, quien detalló sus encuentros con un acosador en la producción. Aunque ni Richard Gadd ni el nombre real de Fiona Harvey se utilizan en la serie, Harvey se ha identificado públicamente como la inspiración detrás del personaje Martha. La demanda alega que Netflix no verificó la veracidad de la historia de Gadd antes de adaptarla para la pantalla, lo que llevó a la dañina tergiversación de Harvey. A medida que la batalla legal avanza, subraya la importancia de la narración ética y las posibles consecuencias de difuminar las líneas entre la realidad y la ficción en las representaciones mediáticas. La respuesta de Netflix a la demanda y el resultado del caso serán observados de cerca, ya que podrían sentar un precedente para la responsabilidad de la industria en la representación de individuos reales en obras de ficción.