Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
El panorama regulatorio en el Perú se encuentra en una encrucijada tras la propuesta del Gobierno de fusionar a los organismos reguladores Osiptel, Sunass, Ositran y Osinergmin en un nuevo ente multisectorial. Esta iniciativa ha generado un rechazo contundente por parte de los propios organismos afectados, quienes han manifestado que dicha fusión representaría un grave riesgo para la estabilidad jurídica y económica del país. En un comunicado conjunto, los cuatro organismos reguladores han expresado su preocupación ante la falta de fundamentos y estudios que respalden la propuesta gubernamental. Señalan que la fusión no solo carece de sustento técnico, sino que también podría acarrear consecuencias negativas para la economía peruana, especialmente en un momento en el que se necesita garantizar la predictibilidad jurídica y económica para atraer inversiones. Es importante destacar que estos organismos desempeñan labores altamente especializadas en sectores económicos diversos como infraestructura de transporte, servicios de saneamiento, telecomunicaciones, energía y minería. La fusión propuesta podría provocar una pérdida de especialización técnica y dar lugar a la influencia política en las decisiones regulatorias, lo que podría resultar en la fijación de tarifas arbitrarias que perjudicarían tanto a los consumidores como a los inversionistas. Los reguladores han hecho hincapié en que su trabajo se ha orientado a convertirse en entidades de clase mundial, sometiéndose a evaluaciones de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y contribuyendo a los esfuerzos del Perú para su adhesión a este organismo internacional. La OCDE ha reconocido la importancia de la especialización técnica de estos organismos y no ha emitido recomendaciones que respalden su unificación. Asimismo, el Tribunal Constitucional del Perú ha valorado la labor de los organismos reguladores en el suministro del marco regulatorio necesario para promover nuevas inversiones y garantizar el bienestar de los usuarios de servicios públicos. Por tanto, resulta cuestionable que el Gobierno proponga una fusión que va en contra de las recomendaciones de organismos internacionales y de la propia jurisprudencia nacional. Los reguladores han recordado que en el pasado ya se han planteado propuestas de unificación que, tras un análisis riguroso, se determinó que no eran adecuadas para los fines del Estado. Insisten en la importancia de mantener su autonomía y especialización técnica para evitar interferencias políticas o de grupos de interés que puedan perjudicar el equilibrio del mercado y el bien común. En este sentido, hacen un llamado a que cualquier medida que afecte el panorama económico del país sea el resultado de un debate técnico y un análisis público que respalde dicha decisión. La falta de consulta previa a los organismos reguladores, con décadas de experiencia en sus respectivos sectores, resulta preocupante y pone en entredicho la transparencia y la legitimidad de la propuesta gubernamental. En conclusión, la fusión de los organismos reguladores en un ente multisectorial planteada por el Gobierno peruano ha generado un rechazo unánime por parte de Osiptel, Sunass, Ositran y Osinergmin. Estos organismos consideran que dicha medida representa un grave riesgo para la estabilidad jurídica y económica del país, poniendo en peligro la especialización técnica, la autonomía y la imparcialidad de las decisiones regulatorias. Es fundamental que cualquier cambio en este ámbito se realice con base en estudios sólidos y en un diálogo constructivo con los actores involucrados, a fin de garantizar la eficacia y la legitimidad de las políticas regulatorias en el Perú.