Nuevo ataque israelí sacude campamentos de desplazados en Rafah: decenas de muertos y heridos en escalada de violencia.

En medio de la escalada de violencia en la región, un nuevo ataque israelí ha sacudido los campamentos de desplazados en Rafah, dejando una veintena de muertos y decenas de heridos. La artillería ha impactado con intensidad en esta zona, sin previo aviso, según informó el Ejército israelí. Tanques israelíes han penetrado en el centro de Rafah, cerca del barrio occidental de Tal al Sultan, en lo que parece ser un avance continuo por el interior de la ciudad, en un contexto marcado por la constante confrontación entre las fuerzas israelíes y los grupos palestinos. Este trágico incidente se suma a la reciente noticia de que un ataque dirigido por Israel contra dos altos cargos de Hamás provocó la muerte de 45 personas en un campo de desplazados de Tal al Sultan. La comunidad internacional ha condenado enérgicamente estas acciones y ha instado a Israel a ejercer la máxima precaución para evitar víctimas civiles. Sin embargo, la situación sobre el terreno continúa siendo caótica y peligrosa para la población palestina. Según fuentes médicas palestinas, los ataques israelíes han alcanzado también zonas cercanas a los almacenes de la UNRWA en el centro de Rafah, provocando más víctimas mortales y heridos. Los hospitales de campaña en la región se han visto desbordados por la cantidad de heridos, mientras que los desplazados han expresado su temor y desesperación ante la escalada de la violencia. El Gobierno de Gaza, controlado por Hamás, ha denunciado que en las últimas 48 horas al menos 72 personas desplazadas han perdido la vida en los bombardeos sobre campamentos improvisados en Rafah, lugares que se suponían seguros. El Gobierno gazatí ha acusado a Israel de cometer "masacres" contra civiles y desplazados, en una clara violación de los derechos humanos y del derecho internacional. La situación en Rafah se ha vuelto insostenible para la población, con más de un millón de personas huyendo de la ciudad desde el inicio de la operación militar israelí el pasado 6 de mayo. A pesar de los llamamientos de la comunidad internacional para detener la violencia y proteger a los civiles, las hostilidades persisten y el número de víctimas sigue en aumento. Ante esta grave crisis humanitaria, el Consejo de Seguridad de la ONU ha convocado una reunión de emergencia para abordar la situación en Rafah. Hamás ha instado a este órgano a tomar medidas inmediatas para detener las violaciones del derecho internacional y proteger a la población civil. La comunidad internacional se encuentra en una encrucijada, con la responsabilidad de actuar con urgencia y contundencia para poner fin a esta espiral de violencia que está devastando la vida de miles de personas en la región. En medio del caos y la destrucción, la población civil de Rafah clama por ayuda y protección, mientras las potencias internacionales buscan una solución para detener esta tragedia que parece no tener fin. El futuro de la región sigue siendo incierto y la esperanza de paz cada vez más lejana en un conflicto que ha marcado la historia de Oriente Medio durante décadas.