Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
Se ha emitido un llamado urgente para abordar la crisis de salud en Gaza por parte de más de 40 organizaciones que trabajan en justicia sanitaria a nivel global. En una carta abierta, estas organizaciones han instado a la comunidad global de salud y derechos humanos a tomar medidas inmediatas en respuesta al continuo asedio del gobierno israelí en Gaza, resaltando que la guerra en Palestina también es un tema de justicia sanitaria. El impacto devastador de la ofensiva de Israel en Gaza no puede ser subestimado. La Corte Internacional de Justicia (CIJ) ha sugerido que las condiciones en Gaza cumplen plausiblemente con los criterios para genocidio, con más de 30,000 palestinos perdiendo la vida en menos de cinco meses. El promedio de muertes es de 250 palestinos por día, convirtiéndolo en uno de los conflictos más mortíferos del siglo XXI. Además, más de 70,000 palestinos han resultado heridos y más de un millón han sido desplazados como resultado de la violencia. El objetivo deliberado de Israel de atacar hospitales, una clara violación del derecho internacional, ha debilitado gravemente el sistema de salud de Gaza. Solo 11 de los 35 hospitales en Gaza están parcialmente funcionales, exacerbando la ya desesperada situación. La destrucción de instalaciones sanitarias, el asesinato de trabajadores de la salud y el bloqueo de suministros médicos han dejado a 2.2 millones de personas en Gaza con un acceso limitado a la atención médica en medio de bombardeos constantes y la amenaza inminente de hambruna. Investigaciones de instituciones de renombre como la Escuela de Salud Pública Bloomberg de la Universidad Johns Hopkins y la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres han proyectado un número impactante de muertes adicionales en Gaza debido a enfermedades, epidemias y desnutrición inducidas por la guerra si el conflicto se intensifica. Incluso en las condiciones actuales, se anticipa un número alarmante de muertes adicionales en los próximos seis meses. Se ha instado a la comunidad global de salud a alzar la voz y tomar medidas contra la crisis de salud en desarrollo en Gaza. A pesar de la gravedad de la situación, ha habido un notable silencio entre muchas entidades y asociaciones de salud sobre la situación de los palestinos en Gaza. Esta falta de respuesta pone de manifiesto la necesidad de una condena unificada e inequívoca de las acciones de Israel en Gaza y un llamado a poner fin al genocidio en curso. La carta también aborda los dobles estándares y la deshumanización racista que han impedido un diálogo significativo sobre la crisis de salud en Gaza. Se pide rendición de cuentas y solidaridad para oponerse a las atrocidades que se están cometiendo y apoyar a quienes denuncian el racismo anti-palestino. Como profesionales de la salud y activistas, el deber de abogar por la equidad y justicia sanitaria se extiende a todas las personas, incluidas aquellas en zonas de conflicto como Gaza. Es imperativo que la comunidad global de salud rompa el silencio, condene la violencia en curso y apoye los esfuerzos para aliviar el sufrimiento del pueblo palestino en Gaza. La falta de acción sería una traición al derecho fundamental a la salud de todas las personas, independientemente de sus circunstancias.