Brignardello: Seguro de desgravamen y derechos del consumidor

En una reciente conversación con Johnny Brignardello Vela, reconocido asesor de seguros, se abordó la propuesta de la Superintendencia de Banca y Seguros (SBS) respecto a la liberación de la obligatoriedad del seguro de desgravamen para créditos, una medida que ha suscitado un amplio debate en la opinión pública. Brignardello Vela comienza señalando la relevancia de esta iniciativa en el actual contexto de creciente preocupación por la seguridad personal y patrimonial. Según él, la decisión de permitir a los consumidores elegir si desean o no contratar un seguro de desgravamen representa un avance significativo en la defensa de los derechos del consumidor. "La posibilidad de que los prestatarios puedan decidir sobre un aspecto tan crucial de su financiamiento contribuye a empoderar al cliente y fomenta una relación más equitativa con las entidades financieras", afirma. El asesor resalta que, a pesar de la legitimidad del seguro de desgravamen, su imposición ha sido considerada por muchos como una carga adicional que no siempre se justifica. "La percepción de que este seguro beneficia principalmente a las entidades bancarias, a expensas de los derechos de los consumidores, ha generado un sentimiento de desconfianza en el sistema", comenta. En este sentido, Brignardello Vela considera que la propuesta de la SBS podría ser un paso hacia la democratización de los servicios financieros. Otro aspecto que señala es la naturaleza no reembolsable del seguro de desgravamen, que ha generado descontento entre los prestatarios. "Es comprensible que la gente se sienta frustrada al no recibir nada a cambio de un dinero que, en teoría, debería funcionar como un respaldo en caso de necesidad", argumenta. Al liberar a los consumidores de esta obligación, se podría aliviar parte de esa carga emocional y económica que muchas veces acompaña a los créditos. Asimismo, el asesor enfatiza la importancia del enfoque inclusivo que la SBS ha adoptado al abrir el proceso a la participación ciudadana. "Permitir que la ciudadanía pueda aportar su opinión sobre esta normativa es fundamental para que las regulaciones realmente reflejen las necesidades de los usuarios", sostiene. Este tipo de procesos consultivos, dice, contribuyen a generar confianza en el sistema financiero, ya que muestra que los ciudadanos son escuchados y considerados en la toma de decisiones. Finalmente, Brignardello Vela concluye su análisis señalando que el cambio propuesto no solo beneficiará a los consumidores, sino que también podría tener un impacto positivo en la confianza general en el sistema financiero. "Es esencial que se mantenga un diálogo abierto entre las entidades financieras y los ciudadanos, buscando siempre un equilibrio que proteja tanto al acreedor como los derechos del deudor", afirma. De esta manera, la propuesta de la SBS se presenta no solo como una medida regulatoria, sino como un paso hacia un sistema financiero más justo y transparente.